Sebastián Hernández quiere que el regalo del cumpleaños número 94 del Junior brille eternamente en su escudo. El mediocampista antioqueño considera que la octava estrella es la mejor forma de hacerle un homenaje al conjunto Tiburón, que ayer estuvo de aniversario.
Para cumplir con el regalo Sebastián tiene claro que “el trabajo y esfuerzo se debe doblegar”.Este inicio de campeonato lo ilusiona, lo pone a soñar, pero mantiene los pies en la tierra y tiene claro que ahora es cuando más hay que seguir en la misma tónica.
Reconoce que aún no hay que echar las campanas al vuelo por empezar sólido tanto en la Copa Sudamericana como en la Liga, pero deja claro que el trabajo de pretemporada y el que se hace diariamente se está viendo reflejando en el terreno de juego en este inicio de semestre.
“El arranque ha sido positivo. Estamos trabajando el día a día con el profe y esto era algo que esperábamos. El buen trabajo que hicimos en la pretemporada está dando sus frutos y esperamos que las cosas vayan mejorando con el paso de las jornadas”, le comentó ayer Hernández a AL DÍA.
El volante está contento con su rendimiento. Volver a tener esa continuidad y confianza por parte del técnico Julio Comesaña lo motiva, y le pone el reto de exigirse más día tras día y partido tras partido.
“Estoy en un momento en el que disfruto mucho del juego. Acá en Junior he tenido continuidad, confianza de los directivos y del cuerpo técnico. Estoy en una plaza exigente y eso me hace sentir vivo. Espero poder terminar este año ganando un campeonato. En los equipos en los que he estado no hay tanta presión como en Junior, pero eso es algo que me gusta y me hace sentir vivo y eso ha sido muy positivo”, agrega el mediocampista paisa.
Sebastián reconoce que este Junior aún no llena las expectativas de la afición rojiblanca, pero considera que los resultados ya se están viendo, y que “más allá de jugadores de renombre, hay un colectivo que trabaja de forma unida para con seguir cada una de las metas”.
También desea que los hinchas se vuelvan a enamorar del equipo y asegura que para eso están trabajando. “Nosotros somos conscientes de eso, igual sabemos que esto apenas está comenzando y hay que tener los pies sobre la tierra. Sabíamos antes del partido con Lanús que nadie daba un peso por nosotros, ni en la Liga, ni en la Sudamericana, los únicos que confiábamos éramos nosotros mismos. Sabíamos lo que podíamos dar. El estilo del equipo y la forma como se trabaja es lo que nos tiene que dar los resultados”, valoró el jugador de 31 años.
Sebastián también está contento con el nuevo papel que está cumpliendo en Junior. Considera que ahora está más lleno de confianza y que desde su posición le puede aportar grandes cosas al Tiburón. Cada vez que salta al terreno de juego dice entregarlo todo y con la satisfacción de jugar con amor.
“Me ha servido en lo personal para agarrar confianza. He tenido un rol específico en estos partidos y siempre intentado poder aportarle al grupo. Estoy en una posición más alejada del arco, pero me siento cómodo y siento que le puedo ayudar bastante al equipo. Estoy jugando de ocho, pero los últimos partidos los he jugado más retrasado, de pronto por la salida de Marlon Piedrahíta y Jarlan. Además hay que darle equilibrio al equipo. Me siento cómodo porque hemos generado sociedades”, concluyó.