Si hay una de las canciones que se baila suavemente dentro de la verbena y que de un momento a otro sube las emociones con su coro “Hurra, hurra, hurra”, esa es Hurray Hurrah, tema que hace más de tres décadas caló en el gusto musical del atlanticense y se quedó para siempre.
Seguramente la ha escuchado y hasta bailado, pero lo que jamás le pasó por la mente fue que se tratara de un tema inspirado en la Navidad. Sí, así como lo está leyendo, hace alusión al nacimiento del Niño Dios.
La canción es de la cantautora Singing Francine, oriunda de Trinidad y Tobago, quien la incluyó en el LP Christmas is love (Navidad es amor), prensado por el sello discográfico RH Productions. De este larga producción que salió en formato de 33 RPM, también hace parte otro de los grandes éxitos de esta morena, se trata de Foolish Man (Hombre tonto).
El tema en su versión original dura 8:50 minutos. Sin embargo, a nivel verbenero el que pegó fue una versión reducida que dura 5:53 minutos, debido a que su ritmo suave para algunos bailadores sonaba aburridor y por eso algunos picoteros decidieron suprimir los compases más suaves. “Muchos bailadores se acercaban a reclamar que lo cortaran, eso se debía a que desconocían en absoluto el alto valor de su lírica”, explica Salomón Rambao, propietario del picó El Nuevo Junior, la máquina de sonido soledeña que se convirtió en la principal impulsora de la canción.
Se lo regalaron sin reparo
Rambao agregó que se lo regaló el propietario del picó El Malembe, de Cartagena, a inicios de los 80, al cual le hizo varios arreglos en el sistema eléctrico y de audio. “No supieron la joya que me dieron, vi la carátula y me llamó la atención porque aparecía una mujer morena sentada en una banca tocando guitarra, en ese entonces las canciones que eran interpretadas por figuras femeninas se comenzaban a poner de moda y para mí sorpresa se terminó convirtiendo en todo un clásico que años más tarde a través de mis hijos descubrimos que era el ideal para disfrutar durante Navidad ya que habla del nacimiento del Niño Dios”.
Esta canción es una mezcla interesante de soca, folk y música country con la cual Francine ganó renombre a nivel internacional, convirtiéndose durante seis décadas en uno de los grandes referentes del calipso. Sin embargo, debido a sus creencias cristianas se quedó enclaustrada en la música góspel.
La letra habla del sacrificio de Jesucristo y también de su resurrección. “Porque un niño nos ha nacido/ porque también a nosotros un hijo siempre nos amará/ Como un ladrón en la noche/ él muestra su luz/ porque él no pretendía hacer daño/ él vino a salvarnos de la condenación”, dice en la primera estrofa cantada en inglés.
El coro es una verdadera muestra de agradecimiento a Dios y va acompañado de una exclamación que se repite constantemente “Hurra, hurra, hurra”.
“Dicen que nuestro salvador ha nacido hoy”.
Con esta letra invitamos a todos los amantes de la verbena a celebrar desde ya el nacimiento del salvador del mundo.