Jesús Malverde, el santo al que le rezan los narcotraficantes más peligrosos

El narcotráfico, esa actividad ilícita de riqueza fácil que históricamente ha desatado muertes trágicas, está rodeada de mucho misticismo.Desde los grandes capos, hasta los que apenas inician en este negocio, tratan de buscar una ayuda extra que les permita ‘el corone’ de su mercancía.

El tráfico de estupefacientes también tiene su lado sobrenatural y de creencia religiosa, en la que los dueños de la cocaína y traficantes encomiendan su fe y sus negocios a sus santos, conocidos como los ‘Santo Narcos’. Se trata de ídolos o estatuas adorados por ellos, compuesta por: un antiguo narcotraficante, ‘Jesús Malverde’ y la Santa Muerte, quienes supuestamente los cuidan y protegen en cada una de las actividades que realizan al margen de la ley.

MALVERDE, EL SANTO NARCO

El malambero Fidel Arzuza, antiguo traficante de ‘coca’ cuenta que ahora pasa una vida tranquila dedicado a otros negocios por la protección que le brindó uno de los ‘Santos Narcos’ más populares, ‘Jesús Malverde’, un ídolo perteneciente a la corte mafiosa. Su leyenda cuenta que fue un saqueador que nació el 24 de diciembre de 1870 en Sinaloa (México), y murió el 3 de mayo de 1909 en su tierra natal. Era un bandido de cabello negro y ojos negros, que habría sido salteador de caminos para ayudar a sus padres y personas pobres.

Actualmente es venerado como santo por muchos, especialmente por los capos del narcotráfico por el supuesto milagro que realizó en los años 70, cuando el capo Julio Escalante ordenó matar a su hijo Raymundo por realizar negocios sin su conocimiento. Según se afirma fue herido de bala y arrojado al mar, Raymundo suplicó a Malverde su ayuda y fue entonces salvado por un pescador.

Desde entonces su adoración fue creciendo entre los ‘narcos’, al punto que hoy se le realizan inmensas procesiones patrocinadas por los amos de los estupefacientes. “Él me protegió en toda mi carrera de traficante de cocaína donde la pasaba por kilo de forma líquida, en el cuerpo, entre pasteles, zapatos y hasta como espray de espuma de Carnaval. Solo me atraparon una vez, pero yo cargaba una imagen de él en mi maleta, así que los policías antinarcóticos quedaron como hipnotizados y pude pasar mi mercancía que iba rumbo a México envasada en envases de perfumes para niños y cremas antiarrugas”,explicó Arzuza, quien agregó que la protección que le ofrecía este santo hacía que los perros antinarcóticos no le ladraran o lo convertía casi que “invisible” para los demás.

“Gavilán Pasao”, es el alias de un joven traficante de drogas que dio su testimonio a Andrés Araujo, investigador de Costa Paranormal.Este relató cómo es su devoción fervorosa hacia la corte mafiosa. “Me inicié en la adoración a mí ‘Santo Narco’ con San Tadeo, actualmente adoro a Malverde y a la Santa Muerte, los tengo tatuados en varias partes del cuerpo y cuando voy con la ‘merca’ por el aeropuerto, carreteras o también vía marítima, siento una adrenalina inigualable, pero a la vez voy seguro porque sé que cuento con la protección de este tridente, son ellos los que hasta ahora me han mantenido vivo y ganando mucho dinero”. Personas allegadas al capo mexicano Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, aseguran que se inició y son fieles a esta corte mafiosa. De hechos sus fantásticos escapes por túneles fueron encomendados a ellos