Hay inquietud en el Congreso de la República porque según funcionarios algo inexplicable está sucediendo en los pasillos de la edificación, toda vez que algunos objetos se mueven solos, las lámparas son encendidas de manera misteriosa y se escuchan ruidos extraños en horas nocturnas.
Estos fenómenos, que se cree son paranormales, han generado tanto miedo que los trabajadores decidieron aprovechar estos días santos para realizar jornadas de oración.
Los avistamientos de fantasmas en el interior del también llamado Capitolio Nacional, situado en plena Plaza de Bolívar de Bogotá, datan de ya hace varias décadas. Sin embargo, las personas encargadas de la seguridad y mantenimiento de esta construcción afirman que cada vez que se aproxima la Semana Mayor, se remueven todos los espíritus que allí habitan.
“Estaba en la presidencia de la Cámara y tras cerrar todas las ventanas y puertas, vi como las lámparas se movían solas y comenzaron a encenderse, algo que me pareció muy raroporque ya no había brisa. En ese momento sentí un fuerte escalofrío porque me habían contado de que aquí sucedían cosas extrañas”, contó una de las encargadas de la limpieza del Capitolio a Caracol Noticias.
Otra de las encargadas del aseo del Congreso, quien ingresa a las 5:00 a.m. a sus labores, sostiene que muchas de sus jornadas inician con sucesos extraños. “Golpean con fuerza las puertas, las impresoras se prenden solas, cosas que no tienen lógica, ya que a esa h o r a aún no ha ingresado el personal de oficinas. Aquí se sienten energías muy raras”,explicó la mujer.
El temor al tercer piso
Según los encargados de la seguridad del Congreso de la República, es en el tercer piso donde mayores fenómenos paranormales ocurren, es tanto el miedo que sienten los agentes de Policía que allí trabajan, que muchos se han negado a realizar las rondas nocturnas por ese lugar debido a los múltiples espíritus que han detectado.
“Se abrieron las puertas del ascensor y había una mujer, la saludé y no me contestó, luego bajé a donde mis compañeros y revisamos las cámaras de seguridad para ver de quién se trataba, pero para sorpresa mía no había registro del ingreso de ninguna mujer, algo que me pareció muy misterioso”, contó un agente.
Algunas de las paredes incluso tienen varios orificios, debido a los disparos que ha realizado el personal de seguridad que trata de ahuyentar los fantasmas. Ante esta ola de hechos extraños, los trabajadores de este lugar con el aval de los presidentes de Senado y Cámara aprovecharán la Semana Mayor para realizar cadenas de oraciones que permitan alejar estos supuestos espíritus.