La solución Vélez: “¿Por qué no ponemos a Atlético Nacional de Selección Colombia?”

Carlos Antonio Vélez tiene esa costumbre de ‘picar’ a los colombianos con las que él mismo hace llamar –con flaca humildad- “Palabras Mayores”, su audio columna que se emite a través de Antena 2, de RCN. Sabe que va a levantar polémica, y que lo van a odiar, pero le gusta.

Esta vez compartió una propuesta que les hizo a sus amigos, ‘cacaos’ de RCN, Davivienda y otros ejecutivos de la organización Ardila Lüle, para solventar el bajo nivel de las estrellas de la tricolor en sus respectivos clubes. Llámese James, Jackson, Falcao, Guarín, Balanta, etc.

“Tengo una idea (dijo), y es la que ustedes suponen, y la que supone mucha gente. Hombre, por qué no ponemos a Atlético Nacional de Selección Colombia en medio de este lío”. Según él –como no podía ser de otra forma- a los demás en la reunión les pareció buena idea.

Audio completo de la columna de Carlos Antonio Vélez en Antena 2

Su descabellada -aquí hay una ironía- propuesta se basa en que “hace rato en Colombia no hay un equipo en tan buena forma como Nacional”.

“Por lo menos para los próximos dos partidos podríamos hacer una cosilla: agarramos a Nacional, en el lugar de Armani, David Ospina; en el lugar de Guerra, por razones lógicas, James Rodríguez. Ya. Y de pronto por si alguien alucina, ponemos a Murillo en el puesto de Enríquez. Listo. Ya”.

Pero la idea no termina ahí. Agrega: “Nombramos presidente o delegado plenipotenciario (a Pékerman), pero que dirija Reinaldo Rueda esos dos partidos, y no le quitamos los 22 millones al patriarca (Pékerman). Esa es una solución... ¡cómo no va a ser una solución!”.

El ‘profe’ (¿?) apunta que Bacca, Cuadrado, Arias y Sánchez “serían alternativas”. Es decir, verían todo el espectáculo desde la banca.

Durante la columna en Antena 2, "Dios Antonio" -remoquete que se ha sabido ganar- insiste en dos cosas: uno, que sea una solución “PRO TEMPORE”, es decir temporal; y dos, que “no importa que sean palabras que se lleve el viento”. Bueno, en eso podemos estar de acuerdo: que el viento haga su trabajo.