¡Insólito! Estaban a punto de casarse, pero decidieron convertirse en monja y sacerdote

En su juventud Javier Olivera y Marie eran novios y tenían planes de casarle luego de terminar sus carreras universitarias, sin embargo un inesperado llamado cambiaría por completo sus vidas.

El inicio de su historia juntos comenzó a partir de las reuniones sobre la religión católica que hacían los padres de ambos y que ellos frecuentaban desde que eran niños, aunque a medida que fueron creciendo dejaron de asistir y no se volvieron a ver más.

En entrevista con ACI Prensa, el ahora Padre Olivera comentó que luego de regresar de un viaje de mochilero que había hecho, a sus 19 años, volvió a encontrarse con esa mujer que años atrás la había deslumbrado, Marie en ese entonces cautivó a Javier con su inteligencia.

“Le pregunté si creía en la virginidad hasta el matrimonio, porque para mí era una especie de invento de la Iglesia. Ella me fundamentó tan bien desde la fe y la razón sobre la pureza que me impactó.”, afirmó P. Olivera.

Al poco tiempo iniciaron un noviazgo donde compartían su interés por la vida cultural a través de la música, la literatura y la filosofía. Empezaron sus carreras de Derecho y asistían a conferencias de autores católicos argentinos.

Para Javier, Marie había hecho que se uniera más a Dios, “Yo comencé a practicar la fe, a rezar, a ir a Misa los domingos. Todo en gran parte gracias a ella”.

Luego de una prospera relación, a sus 21 años, ambos decidieron comprometerse y proponerse casarse luego de que terminaran la universidad, sin embargo para que esto sucediera, aún faltaban dos años y medio.

Sin esperarse, un día el hermano mayor de Marie les dio la increíble noticia de que había decidido dejar todo por ingresar al seminario.

Desde ese momento, comenzó a retumbar en la cabeza de ambos la idea de ¿Qué pasaría si Dios nos llamara a la vida religiosa?, en ese instante la primera respuesta seria que ‘no’, debido a que su noviazgo estaba en su mejor momento y ya habían comprado las cosas para casarse.

Sin embargo, después de tanto pensarlo y de vivir con la incertidumbre sobre sus inquietudes vocacionales, Javier decidió contarle a su novia lo que pasaba, y se llevó la increíble sorpresa de que ella también estaba pesando lo mismo desde que su hermano ingresó al seminario.

Al momento de terminar sus estudios, ambos abrazaron su vocación. En el 2008, con 31 años, él inició su camino a convertirse en sacerdote y ella a monja.

Actualmente, el Padre Olivera es sacerdote, profesor universitario y escritor en Argentina, mientras que la hermana Marie de la Sagesse, se encuentra viviendo en Francia donde realiza su apostolado en una parroquia de ese país.

A pesar de haber vivido una historia amorosa increíble, la religiosa afirmó en la entrevista que “considero una gracia especial el llamado de ambos casi al mismo tiempo, una delicadeza de la Divina Providencia, a quien no se le escapa ningún detalle. Y lo que valoro muchísimo es la continuidad en la amistad no sólo de ambos, sino también de nuestras familias”.

El Padre dijo a ACI Prensa que “Ahora tenemos una amistad hermosísima, es mi mejor amiga”.

Con información de: María Salcedo Saumeth.