Una expolicía argentina que tenía arresto domiciliario fue detenida tras cometer un robo, lo que logró al ponerle su tobillera electrónica a su pequeño perro que quedaba en su casa, informó este martes la prensa de Buenos Aires.
La mujer de 37 años era miembro de la policía bonaerense, pero en noviembre de 2016 fue desafectada y detenida por "resistencia a la autoridad y encubrimiento" y luego se le dio arresto domiciliario en su casa, en la ciudad de La Plata (60 km al sur de Buenos Aires).
El miércoles de la semana pasada fue arrestada tras robar en un comercio exhibiendo dos armas de fuego. Entre las cosa, la detenida se llevó un teléfono con geolocalización, que facilitó su detención.
Así fue el momento:
Las imágenes del robo quedaron registradas en las cámaras de seguridad.
Según el diario El Día de La Plata, la policía la vinculó luego a la expolicía con otros tres robos similares que se habían perpetrado en los últimos días.
El dispositivo de monitoreo electrónico fue encontrado en la casa de la mujer "colocado en el cuello del perro caniche", según una fuente policial citada por la prensa.
"Pudo sacársela porque adelgazó o estaba mal colocada", dijo la fuente policial, que también investiga a la pareja de la detenida, un agente del servicio penitenciario.