La protagonista de esta increíble historia es Flavia Pesce, una abogada argentina de 28 años que por un error en una transacción empresarial recibió en su cuenta bancaria casi 500 mil pesos argentinos, unos 35 mil dólares.
Esto contó la mujer al diario Crónica: “Hice el trámite en el cajero automático y todo fue normal. Deposité una suma de plata y me fui. Pero a la tarde entré a chequear a través del Home Banking que el dinero haya sido acreditado y me encontré con que la cuenta tenía $496.000 de más”.
El extracto bancario de Flavia :(
La cliente solo se percató veinte días después y ante la confusión se propuso reportar el error y tratar de devolver el dinero, a pesar de que su cuenta de ahorros del banco no fue intervenida.
“En un momento dije ‘listo, me voy a Fiji a bucear. Nunca se me pasó por la cabeza usar el dinero, al toque quise devolverlo. Pensé sobretodo que alguien podía estar perdiendo su trabajo por haber hecho mal el depósito”, contó Flavia.
Para su sorpresa, los responsables del error nunca reclamaron ni tampoco el destinatario del dinero. Ella de todas formas se comunicó con el banco, advirtió el hecho y devolvió la totalidad del depósito. El banco no solo nunca le agradeció el gesto de honestidad sino que dejó que ARBA, la agencia de recaudación de impuestos, le retuviera el equivalente a 700 dólares por los costos de la transacción.
“En realidad todo terminó; pero me seguían debitando plata de impuestos”, comentó. La razón del mal entendido fue que “el dinero estaba destinado a una cuenta con el mismo número pero de otra sucursal”, explicó Flavia.
Solo hasta el pasado viernes, con el tramite resuelto, el banco y ABRA le reintegraron su dinero, aunque no hubo una nota de agradecimiento. Una actitud muy de bancos ¿no?