¿Un narco-gato? En la ciudad de Nizhny Tagil, en Rusia, una mujer fue capturada luego de que las autoridades descubrieran que camuflaba droga en un felino que estaba vestido de bebé.
Con una actitud sospechosa y en compañía de su hija, la ciudadana paseaba un coche infantil, por lo que las autoridades rusas decidieron acercarse para ver qué pasaba y revisarla.
Durante el procedimiento, la Policía rusa se percató de lo que parecía ser un bebé, en realidad, era un gato.
La mascota, de pelaje gris, estaba vestida con varios sacos, un gorro, medias y hasta un pañal. Dentro de estas prendas había cinco paquetes de metilefedrina en polvo, un estimulante prohibido.
Tras su detención, el ministerio del Interior de Rusia informó que inspeccionó su lugar de residencia y encontró 170 gramos de sustancias prohibidas, que fueron incautadas.
Por los delitos, la mujer podría recibir una pena de 15 años de cárcel.