Una tonelada y media de cocaína camuflada en manzanas y verduras fue incautada en San Andrés
La Policía Antinarcóticos realizó el operativo en el aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla de Isla San Andrés, en donde la mercancía ilícita estaba lista para ser enviada a Estados Unidos.
Una labor conjunta entre la Dirección Antinarcóticos de la Policía y el Departamento Antidrogas de los Estados Unidos, DEA, permitió la incautación de una tonelada y media de cocaína que estaba lista para volar hacia el territorio norteamericano desde el aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla de la isla de San Andrés.
“En el marco de la operación ‘Magnus’, la Policía Nacional de Colombia a través de la Dirección de Antinarcóticos, en coordinación con la Agencia Antidrogas DEA, logró dar un importante resultado al incautar 1.528 kilos de cocaína que estaba ocultas entre las cajas de cartón con frutas y verduras dentro de un avión de carga que fue inspeccionado por nuestros hombres de antinarcóticos en el Aeropuerto Internacional Gustavo Rojas Pinilla, en la isla de San Andrés”, señaló la autoridad a través de un comunicado.
Según la institución, desde Bogotá fue alertado el cargamento de manzanas que presentaba inconsistencias en la documentación y que había salido del Aeropuerto Internacional Alfonso Bonilla Aragón, del municipio de Palmira con destino a la isla de San Andrés.
La información permitió efectuar un fuerte operativo de interdicción en el aeropuerto, a la espera de la llegada del avión con el cargamento, y luego del aterrizaje se procedió a la inspección.
En esa línea se encontraron las 57 cajas de cartón que traía 1.309 paquetes rectangulares con diferentes logotipos, entre ellos están la forma de un león y manzanas, entre otros, ocultas entre la mercancía ilícitas (manzanas y verduras) que fueron sometidos a la prueba pericial de campo utilizando el reactivo ‘narcotex’, el cual arroja positivo para clorhidrato de cocaína con un peso neto de 1.528 kilos.
Según la investigación preliminar esta droga llegaría a la isla a un centro de acopio y posteriormente iba a ser transportada a través de lanchas rápidas por vía marítima hasta Centroamérica con destino final a los Estados Unidos, donde cada kilo distribuido en las calles de EEUU alcanzaría un valor estimado a los 4.7 millones de dólares, lo que significa una gran afectación a las finanzas de estas organizaciones multicrimen tanto en Colombia como en el exterior.