El pasado miércoles 22 de febrero, dos ladrones fueron asesinados cuando entraron en horas de la madrugada a la casa de un exmilitar para cometer un hurto.
El hecho, que se presentó cerca de las 2:40 de la madrugada, tuvo lugar cuando tres hombres se acercaron a la vivienda y, según pudo narrar una de las víctimas, uno de estos se quedó en la entrada para reportar alguna novedad y el resto entró, abordando a padre e hijo, quienes se encontraban en la residencia.
Al ordenar que entregaran sus pertenencias, Juan Sebastián, un joven de 20 años, se opuso al hurto y en medio del forcegeo con uno de los sujetos, este le propinó un disparo que le ocasionó la muerte en el lugar. Al ver aquello, su progenitor desenfundó un arma que tenía en la pretina del pantalón y le disparó a dos de los antisociales, acabando también con su vida en la vivienda ubicada en Cucutá, luegar de los hechos.
“A las 2:40 de la mañana en el barrio Comuneros, dos delincuentes ingresan a una residencia. Cuando se encuentran hurtando, el propietario de la residencia hace uso legítimo de su arma de fuego y lesiona a los dos delincuentes (fallecidos luego). En este hecho también sale lesionado su hijo, quien fallece”, aseguró el coronel Carlos García, comandante (e) de la Policía de la capital de Santander.
Trascendió que el tercer ladrón logró escapar y se encuentra siendo buscado por las autoirdades, mientras que el padre de la víctima mortal, se entregó a la Fiscalía con su arma, la cual cuenta con permiso y fue absuelto de algún crímen, luego de que lam entidad catalogara su actuar como "legítima defensa".