En Semana Santa las personas aprovechan los días de receso brindados por instituciones académicas y lugares de trabajo para reflexionar en torno a su fe católica, sin embargo, otros tantos también deciden viajar y asistir a lugares de esparcimiento.
Una de las zonas del país más visitadas para el último propósito señalado, son las playas de Cartagena, en las cuales, además del sonido del agua y el paisaje caribeño, gracias a trabajadores informales, se puede acceder a otro tipo de experiencias placeneteras.
Una de estas es el servicio de masajes, lo cual ha venido perdiendo popularidad por quejas de los visitantes, como en un hecho reportado a través de un video este sábado 8 de abril, en el que un bañista señala que una mujer dedicada a dicho oficio le había hurtado su teléfono celular y unas tarjetas de crédito.
En la grabación se evidencia cómo el denunciante tiene tomada a la mujer por el brazo y no deja de señalarla del delito de robo, mientras otras personas lo apoyan y le exigen a la acusada que devuelva las pertenencias.
Tras unos segundos de grabación, finalmente la supuesta masajista que estaba ubicada en el balneario de Bocagrande, le entregó una tarjeta amarilla al hombre, la cual sacó de un bolso en el que el visitante siguió asegurando que se encontraban más de sus objetos de valor.
Finalmente, trascendió que la mujer habría devuelto un teléfono celular y otras tarjetas, lo cual habría confirmado la versión inicial del bañista, sin embargo, se desconoce hasta esta publicación si la señalada fue judicializada.