El pasado miércoles 15 de marzo se presentó un tiroteo en el que se vio envolucrado un militar que estaba de descanso y tres hombres, que presuntamente, intentaron robarle su carro.
Según información de las autoridades, el uniformado se encontraba haciendo servicio de transporte por medio de aplicaciones móviles, cuando fue interceptado por sus atacantes que intentaron despojarlo del volante de su auto.
Sin embargo, lo que no sabían era que su víctima contaba con un arma, la cual portaba de manera legal, por lo que en una ágil maniobra, les disparó hiriendo a dos de ellos y haciendo huir al restante.
Tras la alerta a la Policía, los uniformados lograron la captura del sujeto que se dio a la fuga y trasladaron a los impactados con bala a un hospital de Kennedy, cerca de la localida de Fontibón, en Bogotá, lugar de los hechos.
Trascendió que uno de los presuntos antisociales fue herido en el cuello, por lo que se encuentra en delicado estado de salud y tuvo que ser remitido a la unidad de cuidados intensivos del recinto hospitalario antes mencinado.
Por su parte, el militar se encuentra la espera de la justicia, que determinará si efectivamente actuó en legítima defensa.