Integrante del CTI cayó como parte del Clan del Golfo en el Atlántico
Un operativo de la Policía Nacional destapó una red de corrupción y crimen organizado en el Atlántico: entre los once capturados de la subestructura ‘Carlos Daniel Fulaye Vargas’ del Clan del Golfo, figura un funcionario activo del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía.
Golpe contra el Clan del Golfo
La captura se dio en Soledad y hace parte de una investigación que tomó más de seis meses en el marco de la ofensiva nacional contra el multicrimen. Entre los detenidos están los tres principales cabecillas de la estructura, señalada de estar detrás de 17 homicidios cometidos entre 2024 y 2025, así como de manejar rentas criminales y alianzas con el GDO Los Pepes.
El máximo jefe, identificado como Jonathan Joel Mercado Merlano, alias Corioto, tenía bajo su mando a más de 270 hombres y es señalado como determinador del “plan pistola” en el que fue asesinado el subintendente Ronald Montañez, el pasado 28 de abril en Palermo, Magdalena.
Con más de 15 años en el crimen, las autoridades lo describen como uno de los hombres de confianza de alias Jefersson, sucesor de Chirimoya en el control de rutas de narcotráfico desde Barranquilla. Otro de los detenidos es Jorge Isaac Montes Naar, alias César o Cartagena, quien fungía como segundo cabecilla. Se desmovilizó en 2005 del Bloque Central Bolívar, pero reincidió en el delito. En 2020 fue condenado en Antioquia a 84 meses de prisión por porte ilegal de armas y concierto para delinquir, aunque recuperó la libertad en 2024.
Infiltrado en la Fiscalía
La sorpresa mayor fue la captura de Jorge Luis Santiago Charris, alias Chiquito Cuello o El del CTI, de 58 años, funcionario activo del CTI de la Fiscalía. Según las investigaciones, habría entregado información confidencial al Clan del Golfo, facilitado reuniones clandestinas y reclutado personas para fortalecer la organización, a cambio de beneficios económicos. De acuerdo con la información oficial, Santiago Charris incluso integró, durante un mes, el esquema de seguridad de una fiscal de la Dirección Especializada contra el Lavado de Activos, lo que aumenta la gravedad de la infiltración.
Incautaciones y evidencias
En total, once personas fueron capturadas en el operativo. Además, la Policía incautó un arma de fuego, 31 cartuchos, 20 teléfonos celulares, un computador y una libreta con datos claves para avanzar en los procesos judiciales. Las autoridades aseguraron que continuarán las investigaciones para desmantelar por completo la estructura, que operaba bajo un esquema de outsourcing criminal en alianza con Los Pepes, especialmente en el negocio del narcotráfico.
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