Familiares y amigos de pareja que falleció en el norte de B/quilla claman por justicia
Los jóvenes estaban en una reunión familiar y se trasladaban hacia otra cuando al no percatarse de una señal de pare fueron sorprendidos por un automóvil de color blanco, marca Renault, que venía a altas velocidades.
Familiares de Dayana Escorcia y Juan Andrés Maury González se congregaron en un plantón exigiendo justicia tras un trágico accidente en Barranquilla.
El conductor involucrado fue liberado bajo la calificación de homicidio culposo, a pesar de conducir en estado de embriaguez.
Dayana, a punto de graduarse como contadora, y Juan Andrés, su pareja, perdieron la vida en el impactante choque
Si tienes algo más de tiempo:
Familiares de Dayana Escorcia y Juan Andrés Maury González, víctimas fatales del siniestro vial que se registró el pasado domingo 11 de febrero, en el barrio San Vicente de Barranquilla, se congregaron en un plantón justo en el lugar de los hechos para pedir justicia por la muerte repentina de sus seres queridos.
Con diferentes pancartas y un cantico al unísono que decía “queremos justicia, queremos justicia”, las personas se tomaron la esquina de la calle 85 con carrera 47, admitiendo su rechazo ante la decisión de las autoridades de liberar al conductor que colisionó con la moto en la que se encontraban los antes mencionados.
Matteo David Rabbal Olarte, como es verdaderamente su nombre (conductor), fue liberado tras una audiencia en la que se consideró el hecho como homicidio culposo con responsabilidad compartida. Esto pese a que los reportes indicaban que el hombre iba en estado de embriaguez.
De Dayana Escorcia se sabe que le faltaban dos semestres para graduarse de contadora pública y trabajaba con el Grupo Aval como asesora comercial. De la misma forma, vivía con su pareja Juan Andrés Maury, también fallecido, y tenían planes de comprarse un apartamento.
Los jóvenes estaban en una reunión familiar y se trasladaban hacia otra cuando al no percatarse de una señal de pare fueron sorprendidos por un automóvil de color blanco, marca Renault, que venía a altas velocidades.
“El impacto fue tan fuerte que el carro le hizo un hueco a un bordillo. Mi hijo que iba detrás de ellos me dice que salieron como unos proyectiles. Mi hija chocó contra un poste que está en la esquina y cayó encima de una jardinera. Su novio se pegó con un aviso y cayó en el piso a un metro y medio de ahí. La moto quedó prácticamente donde hay unos consultorios de medicina como alternativa o algo así”, contó en su tiempo Jesús Escorcia, padre de Dayana.
“Vamos a llegar hasta las últimas instancias que nos brinde las leyes colombianas”, también reconoció en aquella entrevista.