El narcotraficante Oscar Camargo Ríos, más conocido como alias Pichi, se fugó de su vivienda, donde cumplía detención domiciliaria, en Medellín.
La noticia se conoció en la madrugada de este viernes 11 de octubre, tras una alerta de “transgresión” que emitió el brazalete poco después de que funcionarios del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) le pasaran revista en su domicilio, ubicado en El Poblado.
“El día de ayer, en horas de la tarde se le pasa revista al señor, se encuentra en el domicilio; una vez se va la revista el brazalete emite alerta de transgresión en el CERVI, centro de monitoreo, ante la alerta del brazalete se envía de nuevo cuadrilla de Domiciliaria y no se encuentra al señor en el domicilio”, aseguró el Inpec.
Asimismo, las autoridades indicaron que en la primera visita en la que sí estaba Oscar Camargo, alrededor de las 5:00 p. m. del pasado jueves 10 de octubre, le fue tomada una fotografía dentro del domicilio (vestía pantalón, zapatos, camiseta y suéter de color negro) como soporte de la inspección, pero tan pronto se fueron los funcionarios alias Pichi se habría escapado.
Se conoció que al regreso de las autoridades a la vivienda, solo encontraron el brazalete tirado, y de inmediato se desplegó la búsqueda incesante de este sujeto para lograr su pronta captura, mediante diferentes operativos en todo el país.
También, el Inpec señaló que al percatarse de esta situación “se hace el informe al juez del caso, y en este momento se adelanta el protocolo cuando se presentan esas novedades con PONAL”.
De acuerdo a información preliminar, alias Pichi iba a ser trasladado a un centro penitenciario después de dicha visita, por lo que se presume fue el motivo para que el narcotraficante se escapara y no cumpliera su medida de casa por cárcel.
Cabe resaltar queel Juzgado Tercero de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad le había permitido la detención domiciliaria a Camargo Ríos, pese a que ya había violado en ocho oportunidades esta condición de casa por cárcel.
Alias Pichi es señalado de estar al mando del 70% del tráfico local en Cúcuta, Norte de Santander; y se encontraba cumpliendo su pena, por los delitos de concierto para delinquir y tráfico de estupefacientes, en El Poblado, Medellín.