Con 49 votos en contra y 47 a favor, la plenaria del Senado de la República hundió la propuesta de consulta popular que impulsaba el Gobierno de Gustavo Petro como vía para promover la reforma laboral.
La decisión fue rápidamente celebrada por la oposición. La senadora Paloma Valencia, del partido Centro Democrático, manifestó en redes sociales: "Ganamos. Se hunde la consulta Dios con nosotros!! Es un verdadero milagro".
A pesar del revés para la consulta, la misma sesión dejó abierta una puerta para la reforma laboral. El Senado aprobó una apelación que busca revivir el proyecto de ley, el cual había sido archivado previamente en la Comisión Séptima de la corporación.
El ministro del Trabajo, Antonio Sanguino, expresó la postura del Gobierno frente a esta situación. Señaló que la aprobación de la apelación, especialmente considerando los tiempos legislativos restantes, genera suspicacia.
"Hay suspicacia porque tenemos unas limitaciones de tiempo. Hay unas sospechas de que a lo mejor quieran hundir o quieran obstruir la consulta popular solo con la aprobación de la apelación", afirmó el ministro.
Sanguino fue enfático al precisar que para el Ejecutivo, "apelación para el Gobierno no es igual a aprobación de la reforma".
Reiteró que consideran la consulta popular como el mecanismo más seguro para garantizar los derechos laborales, e instó a que, para disipar dudas sobre las intenciones, se apruebe tanto la apelación como la consulta.