Yesica Lopera se escapó de la cárcel, la recapturaron y volvió a sonreír en la foto
Huyó de El Buen Pastor la madrugada del jueves, al aprovechar un descuido de la guardia, y cayó en Soledad.
La mujer se encuentra señalada por el asesinato de su novio. Huyó de El Buen Pastor la madrugada del jueves, al aprovechar un descuido de la guardia, y cayó en Soledad tras un intenso operativo. Al igual que en la reseña inicial, volvió a posar sonriente.
En tiempo récord, uniformados de la Policía Metropolitana de Barranquilla recapturaron la tarde de este viernes a Yesica Lopera Bolívar, la joven de 25 años que se había fugado la noche del jueves de la cárcel El Buen Pastor.
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Lopera Bolívar es señalada de ser la autora del asesinato de su novio y, además, el año anterior consiguió una especie de popularidad en redes sociales por posar sonriente para una fotografía de reseña policial.
Según información entregada por las autoridades, la mujer fue ubicada en cercanías del barrio Las Moras de Soledad.
Sobre la fuga, personal del penal manifestó que la mujer se “voló” por una pared que divide el pabellón 1 de la calle y emprendió su huida. “Aprovechó un descuido de la guardia durante la noche”, aseguró una fuente del penal, quien prefirió no entregar su identidad.
Algo que llamó la atención de las autoridades fue que al momento de legalizar la captura, las mujeres posaron y sonrieron para la foto de la Policía. ¿Qué les habrá causado tanta gracia? | ALDÍA.CO
El año anterior, Lopera Bolívar había sido capturada dos veces por la Policía Metropolitana: una por atracar en mayo a un taxista y en noviembre como sospechosa por el asesinato de su novio, John Mario Álvarez Giraldo, de 25 años. Por este último hecho permanecía tras las rejas y a la espera de ser sometida a la justicia.
Sospechosa de matar a su novio
Agentes de policía judicial del CTI habían capturado en noviembre del año anterior a Lopera Bolívar, como principal sospechosa del homicidio de su novio.
John Mario Álvarez murió el 30 de junio en una clínica de Barranquilla, 11 días después de ser herido de un tiro en el cuello, en una riña con Lopera. La discusión sucedió el 19 de junio, a las 9:10 de la mañana, en una casa ubicada en la calle 40 con carrera 31 del barrio Chiquinquirá, suroriente.
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La mujer tenía orden de captura por el delito de homicidio, expedida por un juez, a solicitud de un fiscal. La aprehensión se dio en la calle 40 con carrera 26B, barrio Montes.
El general Gonzalo Londoño, comandante de la Policía Metropolitana en ese momento, declaró tras el ataque que, inicialmente, se tuvo información de que una persona se había propinado un impacto de bala.
“Unas parejas estaban departiendo, una de estas se aleja y queda el señor con su compañera y luego se escucha un disparo. Al momento que regresan las personas, la pareja manifiesta que esta se propinó el impacto. Cuando miramos el tema de trayectoria, se ve que el impacto es en el cuello, de atrás hacia adelante, del cual se logra inferir que esta mujer fue quien posiblemente accionó el arma contra su pareja”, informó el día de los hecho.
La riña
De acuerdo con un reporte policial, Lopera y su pareja John Mario Álvarez Giraldo estaban desde el sábado con dos amigos, en la casa donde vivían.
Tras departir más de nueve horas, los moradores de la vivienda decidieron irse a dormir. Lopera y Álvarez, sin embargo, siguieron consumiendo licor y de un momento a otro comenzaron a discutir.
El reporte de las autoridades señala que en medio de la disputa, la mujer aprovechó que Álvarez le dio la espalda para propinarle un disparo que lo impactó en el cuello.
Yesica Lopera despertó de inmediato a los dos residentes del inmueble y les dijo que habían intentado atracarlos. Inmediatamente John Mario Álvarez fue trasladado a la Clínica Campbell, donde fue ingresado a la unidad de cuidados intensivos “bajo pronóstico reservado”, según el reporte médico que entregó el centro asistencial a los familiares y a la Policía.
Una vez se registró el hecho, agentes de la Sijín adscritos a la Metropolitana de Barranquilla, realizaron una inspección a la vivienda, en la que fue hallado un revólver calibre 32.
La Policía Metropolitana informó luego de la agresión de la que fue víctima Álvarez Giraldo que este último presentaba una condena domiciliaria vigente por el delito de hurto del año 2014.
Antes había purgado ya una sentencia de 24 meses por porte ilegal de armas del 2012 y también tenía otro registro penal por violencia intrafamiliar de 2011.
