Una cita con la muerte cumplió en la mañana de ayer John Franklin Wellman Llanos, asesinado de cuatro tiros dentro de una compraventa de motos, en la calle 44 No. 7H-35, barrio La Alboraya, en Barranquilla.
El reporte de las autoridades indica que Wellman Llanos, apodado el Gordo, llegó al sitio, al parecer, a cumplir una cita, pero al lugar arribaron dos pistoleros en moto: el parrillero se bajó y, sin perder tiempo, ni decir nada, sacó un arma y le disparó.
La víctima fue impactada por cuatro balazos (brazo izquierdo, tórax, el cuello y espalda) y murió en el acto.
Los investigadores revisaron las cámaras de la Policía instaladas en la zona y encontraron que por la calle 45 con carrera 8 circuló la moto que usaron los asesinos, marca Auteco Bóxer, de color negro.
El piloto, según datos de las autoridades, vestía pantalón negro y camiseta azul, mientras el parrillero, que tapó la placa de la moto con las manos, llevaba pantalón negro y camisa blanca de manga corta.
El informe de la Policía recalcó que John Franklin Wellman Llanos tenía detención domiciliaria desde 2016 por el delito de porte ilegal de armas. La medida la ordenó el Juzgado Promiscuo Municipal de Maicao (La Guajira).
No obstante, en septiembre de ese mismo año fue capturado en la calle 61 con carrera 26, en Barranquilla, cuando atracaba un local de giros.
Ese día las autoridades también detuvieron al patrullero de la Policía Jean Carlos Dorado de Lima y Germán Emilio Dulce Utria, como presuntos participes en el atraco.
La noticia de la época señala que los tres delincuentes ingresaron al local de giros y valiéndose de armas de fuego se apoderaron de $6 millones en efectivo. Sin embargo una patrulla de la Sijin (Policía Judicial) lo sorprendió infraganti y los tres fueron capturados.
A Wellman Llanos también le figura una anotación por el delito de amenazas (2015).