Un tremendo esfuerzo jurídico adelantan las autoridades para judicializar a los dos capturados y posibles autores del atraco en el que resultó herido, con una puñalada en el ojo derecho, el agente de la Policía, Jorge Viloria.
El terrible caso ocurrió a las 2:00 de la madrugada del pasado viernes, en la carrera 18 con calle 66, barrio Las Moras, en Soledad.
Ayer el general Ricardo Alarcón, comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, reconoció el caso y confirmó que el capturado es la persona que aparece en un video afirmando que está detenido “por hurto” y porque, como él dice, “le saqué el ojo a un policía con un cuchillo”.
En el video esta persona se identifica como José Miguel Martínez Fernández; y su supuesto cómplice asegura que se llama Jorge Luis Espitia.
“Una vez revisados los videos sabemos que esta persona puede estar relacionada con los hechos, pero esta captura se da por porte ilegal y no por los hechos que sucedieron”, explicó el comandante de la Mebar.
AL DÍA conoció que la Fiscalía y la Policía Judicial están recopilando pruebas (videos, testimonios, etc.) para lograr judicializar a los capturados, o por lo menos al presunto agresor como José Miguel Martínez Fernández, por el delito de lesiones personales agravadas, además del porte ilegal de armas.
Sobre la condición médica del agente Jorge Viloria el general Ricardo Alarcón señaló: “Nuestro uniformado fue atendido en la Clínica de la Policía y sale con una excusa de diez días. Los primeros dictámenes que nos dan dicen que no le comprometió el ojo”.
La versión del General contrasta con la información que se manejó en el barrio Las Moras, durante el pasado fin de semana, en especial en la cuadra donde ocurrieron los hechos, ya que los vecinos aseguraron que el agente había perdido su ojo con base en información que supuestamente les trasmitieron los familiares del uniformado.
No obstante este medio también tuvo acceso a una imagen que muestra la herida del agente Viloria cerrada con una sutura de cuatro puntos y el ojo derecho amoratado.
Quedó grabado
El impresiónate caso, que se volvió viral porque quedó registrado en una cámara de seguridad, ocurrió cuando el patrullero, vestido de civil, se desplazaba con rumbo a su casa y fue interceptado por dos atracadores, quienes lo despojaron de sus pertenencias: celular, reloj, cartera y anillo.
No contento con haberlo robado uno de los asaltantes le asestó una puñalada en el rostro.