Lo que pasó en la habitación 2 del motel La Magdalena, en San Roque, es un misterio para los familiares de Johana Ferrer Coronado, de 34 años.
De acuerdo con el registro de ingreso, la mujer entró a la pieza el pasado sábado a las 9 p.m. acompañada de su pareja, un hombre que se identificó como Franklin Varela, de 38 años. Pero la madrugada de ayer la encontraron sin vida, colgada con la licra que vestía en uno de los muros del cuarto.
¿QUÉ PASÓ?
Uno de los empleados de turno dijo que durante la madrugada de este domingo alcanzó a escuchar una acalorada discusión entre la pareja y que a las 4:50 a.m., el tipo salió de la habitación.
“Diez minutos después de que el señor se fue, se escucharon los quejidos de ella y la encontraron colgada”, relató a este medio Joel Andrés Badillo Vides, empleado del establecimiento en el que con frecuencia se hospedaba la pareja, que pagaba 15.000 pesos por día.
Datos preliminares de la Policía Metropolitana de Barranquilla indican que se trataría de un suicidio. Sin embargo, las autoridades añadieron que el caso está en manos de los investigadores, para esclarecer los hechos y confirmar si se trató de un feminicidio o un suicidio.
En esta habitación hallaron a Johana Ferrer. | Foto: Archivo
Hasta el cierre de esta edición, las autoridades policiales desconocían el paradero de Franklin Varela, su compañero sentimental. A Ferrer Coronado la encontraron a las 5 a.m. y de la calle 38 con carrera 35 —donde queda el motel— la llevaron al Hospital General de Barranquilla. Los médicos de ese centro asistencial confirmaron su muerte y la Sijín hizo la inspección técnica del cadáver.
LAS PELEAS ERAN CONSTANTES
La última vez que Milena Ferrer Coronado habló con su hermana fue el pasado viernes por una llamada telefónica.
Milena Ferrer Coronado, hermana de la fallecida. | Foto: Archivo
Según Milena, Johana sostenía una relación tormentosa con Franklin desde hace siete meses en la que las peleas y los golpes eran frecuentes a causa de los celos de ambos. Agregó que en dos ocasiones presenció discusiones en las que Franklin intentó herirla con una navaja.
“Ella era muy celosa y él también. Sé que él le daba mala vida y le pegaba pero ella estaba enamorada”, dijo Milena en diálogo con AL DÍA.
Por eso, no descartan que haya pasado algo más en esa habitación del motel. Aunque familiares señalaron que el pasado 31 de diciembre Johana había intentado quitarse la vida con un alambre, precisamente luego de discutir con Franklin.
En esa ocasión, el padre de la mujer alcanzó llegar a tiempo antes de que se colgara del techo. Johana había rechazado recibir ayuda psicológica.
Johana vivió la mayor parte de su vida en la calle 11F No. 1D-76, barrio El Carmen, de Malambo, de donde era oriunda; tenía tres hijos fruto de su primera relación sentimental y se ganaba el sustento diario con la venta de bolsas plásticas a las afueras de un supermercado en Barranquilla.