Wilmer Otero Rosales, profesor de educación física, se salvó de morir este jueves tras ser baleado por un hombre en plena calle del barrio La Candelaria, en Montería.
De acuerdo con el Meridiano, Otero estaba visitando a una amiga y cuando empezó a caminar por las calles del barrio, un sicario se le acercó y le disparó dos veces sin mediar palabras.
Al parecer, el criminal intentó rematar al hombre, pero el arma se le atascó.
Sin embargo, lo más curioso del caso es que el delincuente sacó el celular, comenzó a tomarle fotos al profesor (pensando que estaba muerto) y huyó con un cómplice que lo esperaba en una moto.
Según la versión de los testigos del terrible hecho, el agresor quería llevarle una evidencia al autor intelectual del ataque para demostrarle que había logrado su cometido.
Otros testigos tienen una segunda hipótesis sobre lo ocurrido, pues creen que se trata de un atraco para robarle la moto.
Por otra parte, alcanzaron a trasladarlo a tiempo a un hospital y el docente se encuentra recuperándose de las heridas. Los disparos los recibió en la cara y en el brazo.
Las autoridades están investigando el caso para dar con la identidad de los agresores.