Los recientes homicidios del taxista Efrén Santiago Soto, asesinado de un tiro en la cabeza, al parecer, en medio de un atraco, y el de la abogada Claudia Patricia Rodríguez Delgado, asesinada también de un tiro en la cabeza, al oponerse al hurto de su celular, dan cuenta de la ola de inseguridad que azota a Barranquilla.
Ambos homicidios se registraron en la madrugada y lunes de este jueves en el norte de la ciudad y en el barrio Los Andes, respectivamente.
Pero los asesinatos del taxista y de la abogada no son los únicos que se han registrado este año en medio de atracos. Otras seis personas perdieron la vida a manos de delincuentes armados.
El primer caso se presentó el pasado 11 de enero en la calle 65 con carrera 9K1 del barrio El Bosque, cuando Alí David Guerrero Bolívar, a quien le faltaban tres días para cumplir 20 años de edad, fue asesinado de un tiro en el pecho cuando intentó evitar que una pareja fuera atracada por delincuentes en moto.
Seis días después, el 17 de enero, se presentó el segundo homicidio en medio de un atraco, pero en la calle 43 con carrera 31, barrio La Arboleda, de Soledad.
En ese lugar se encontraba celebrando su cumpleaños número 29, Roger Villafañe Mendoza. Al sitio llegó un vehículo del que se bajaron dos delincuentes que lo intimidaron con un arma para robarle sus pertenencias, y en medio de un forcejeo para evitar ser atracado, Villafañe Mendoza recibió un tiro en la cabeza con un arma traumática. La víctima falleció horas después en un centro asistencial.
Antes de finalizar el mes, el 30 de enero se produjo el tercer asesinato en medio de un atraco.
El hecho ocurrió en la calle 29 con carrera 35, barrio Rebolo, donde el conductor de un camión fue asesinado de un tiro en el tórax por un delincuente, en medio de un forcejeo para evitar que le robaran sus pertenencias. La víctima fue identificada como John Jairo Macana Peña, de 43 años y oriundo de Ibagué.
Los otros asesinatos
El 9 de febrero pasado, Humberto Mario Barros Ospino, de 29 años, se encontraba sentado en un andén de la calle 107 con carrera 34, barrio Las Estrellas, dialogando con otra persona por celular, cuando fue abordado por el parrillero de una moto que intentó despojarlo de su celular.
En un intento por evitar el hurto, el delincuente le propinó un tiro en la cabeza. Barros Ospino fue trasladado a un centro asistencial, pero murió al poco tiempo por la gravedad de la herida que sufrió.
Dos días después, el 11 de febrero, fue asesinado de un balazo en la espalda, Alfonso Eduardo Sandoval Cueto, un domiciliario de 40 años. El hecho sucedió en la carrera 13 con calle 73, barrio Villa Angelita, de Soledad.
Cuando se encontraba en ese sector, Sandoval Cueto fue abordado por dos hombres que iban a pie y con un arma de fuego le quitaron su motocicleta. En medio del forcejeo le propinaron el disparo que le ocasionó la muerte minutos después en la Clínica Los Almendros.
Finalmente, el pasado 17 de marzo fue asesinado a bala el domiciliario Carlos Mario Arias Suárez, cuando se encontraba en la carrera 21 con calle 34 del barrio San José.
La víctima se desplazaba en su motocicleta cuando fue interceptado por dos delincuentes que también iban en moto, se le cruzaron y lo desojaron de sus pertenencias. Antes de huir el parrillero de la moto le propinó un tiro en la parte baja de la espalda.
Carlos Mario Arias Suárez fue trasladado a la Clínica Centro, donde falleció 24 horas después del ataque.
En lo que va del año se han registrado 73 homicidios en Barranquilla y 37 en Soledad.