Jaime Gutiérrez Ospina, el chofer del bus que el 18 de mayo del 2014 se incineró en una vía pública de Fundación, causándole la muerte a 33 niños y a una mujer adulta, fue capturado en Bogotá después de evadir la justicia desde el año pasado.
Condenado a 10 años y 11 meses de prisión, su aprehensión se produjo en la localidad de Engativá, al occidente de la capital del país, en desarrollo de un operativo rutinario de la Policía a vendedores de la calle y transeúntes.
Se indicó que estaba prófugo de la justicia, pues al momento de la sentencia no compareció al proceso, sino su defensa.
El procesado tenía que firmar un acta de compromiso en el que se establecía su casa como lugar del cumplimiento de la pena, pero no lo hizo, y además, no canceló la multa económica que se le impuso.
El teniente coronel Jimmy Palacio, comandante de la Estación de Engativá, reportó que los uniformados estaban en función de control y registro en el sitio El Portal de La 80, cuando al momento de tocarle el turno a Gutiérrez Ospina, lo notaron nervioso.
“Procedimos a verificar en el sistema de antecedentes sus datos, corroborando que tenía una orden de captura por el delito de homicidio culposo”, comentó el oficial.
Manifestó que acto seguido conocieron que se trataba del conductor del bus en donde hace 5 años, en Fundación, murieron calcinados 33 niños, mientras que otros 15 resultaron heridos.
“Este hombre será puesto a disposición de más autoridades judiciales, para cumplir la condena ordenada por un Juez de la República, en el departamento de Magdalena”, añadió el teniente coronel Jimmy Palacio.
La sentencia
Jaime Gutiérrez Ospina y el pastor evangélico Manuel Salvador Ibarra, fueron señalados por la justicia como directos responsables del siniestro que hace 5 años conmocionó a todo un país y que a la fecha sigue causando inmenso dolor.
Tras una audiencia, el juez Primero Penal del Circuito de Ciénaga condenó al conductor Jaime Gutiérrez Ospina a 10 años y 11 meses de prisión, mientras que al líder evangélico le impuso una pena de 10 años y 8 meses
La justicia determinó que los dos procesados tuvieron participación directa en los hechos que rodearon el incendio del bus que transportaba a los menores luego de asistir a la Escuela Dominical en la Iglesia Evangélica Pentecostal Unidad de Colombia.
El juez de la causa citó las imprudencias en las que incurrieron los dos acusados, revelando que tenían conocimiento sobre las fallas técnicas y mecánicas que presentaba el bus, así como el riesgo que corrían los menores de edad.
Familiares
Los familiares de las víctimas manifestaron a este medio su sorpresa por la recaptura de Jaime Gutiérrez, el chofer del bus, pues afirmaron no tener idea que estaba evadido.
Maryuris Rodríguez, quien en la tragedia perdió a su hijo de 4 años, manifestó que “no sabía que estaba huyendo”, y añadió que “solamente ellos, el chofer y el pastor, “no son los culpables. Aquí en Colombia la justicia solo es para nosotros los pobres”, precisó.
Señaló, entre los responsables de lo sucedido a los policías del tránsito que permitieron que un bus de esas características y en ese estado rodara por las calles de Fundación. Dijo que inclusive, ella misma, se siente culpable por dejar su hijo con desconocidos.