Ni siquiera ante el juez dejaron de reírse de cuando en cuando Yesica Yamile Lopera Bolívar, 25 años; y Dori Luz Hernández Peña, de 23; las mujeres capturadas con un sujetos después de atracar a un taxista con un arma de juguete a las 8 de la noche del sábado.
Las ‘Mamitas’, como las bautizaron en los juzgados, cometieron el delito en compañía de Daniel Jesús De la Hoz Herrera, 19, quien tenía casa por cárcel desde noviembre de 2015 por el delito de hurto a mano armada, y un antecedente por porte ilegal de armas, de enero del mismo año.
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Los tres delincuentes aceptaron los cargos por hurto calificado agravado, pero a Daniel fue el único al que mandaron para la cárcel porque sus antecedentes lo convierten en un peligro para la sociedad.
A Yesica (la rubia) y a Dori (la pelinegra) les dieron detención domiciliaria porque no registran anotaciones judiciales, aunque Yesica tiene un antecedente por porte de marihuana
Se conoció durante la diligencia que el sábado a las 7:40 de la noche los tres delincuentes abordaron un taxi en la calle 43 con carrera 36, barrio Chiquinquirá, y le pidieron al taxista que los llevara a Medicina Legal, en el barrio Los Andes, y al llegar a ese sitio la banda atacó.
Daniel se sentó detrás del taxista, Dori a su lado y Yesica en el puesto del copiloto. Cuando el taxista frenó en Medicina Legal, el bandido le puso la pistola de juguete en la cabeza y le dijo que no se hiciera matar, rápidamente las ‘Mamitas’ lo raquetearon y le quitaron el celular, la cartera y el producido del día.
El taxista quedó al ‘cuidado’ de Yesica y Daniel, mientras Dori fue a buscar otro taxi para huir del sitio. Unas personas que caminaban por allí notaron la situación, les pareció rara y le informaron a unos policías que estaban patrullando.
Cuando los uniformados llegaron encontraron a Dori bajándose para subir al otro taxi, y le ordenaron a todo el mundo quedarse quieto. El taxista que acaban de atracar contó que Yesica, cuando vio venir a los agentes, le ordenó que la besara para pensaran que eran novios, y le dijo a Daniel que escondiera el arma de mentiras bajo el asiento, pero los uniformados ‘no comieron de cuento’.
Como dato curioso ninguno de los tres hampones quiso revelar su dirección y también renunciaron al derecho de hacer una llamada. Incluso Dori les dijo a los policías que no podían requisarla porque ella era mujer y tenía pocos días de estar embarazada, pero durante las audiencias la defensa no aportó los exámenes que sustentaran esta afirmación. Se supo por redes sociales que Dori tiene un bebé próximo a cumplir tres meses, y que reside en el barrio San Roque.