Policía, ¿culpable por la bala perdida que dejó a Gisella con muerte cerebral?
La joven tiene muerte cerebral y su pronóstico es reservado. Policía indica que integrantes de dos pandillas del suroccidente se enfrentaban con piedras y armas artesanales.
Familiares Gisella Rodríguez Jiménez, de 19 años, quien fue herida en la cabeza la tarde del sábado, durante una pelea de pandillas en el barrio Siete de Abril, insisten en que una bala de la Policía es la causa de que se encuentre bajo observación en el Hospital General.
De acuerdo con Ana Manjarrés, su nieta presenta “muerte cerebral” y los médicos le dicen que su condición “es de pronóstico reservado”. Rodríguez se encuentra respirando de manera “artificial”, sin que le hayan extraído el proyectil alojado en su cráneo.
Según vecinos, la pelea se presentaba entre las pandillas los Menores, del barrio Siete de Abril, y los Calladitos, de Santa María, en el suroccidente de la ciudad, durante el aguacero que se registró el sábado.
“La pelea no se estaba registrando por este sector. Cuando escuchamos la bulla, salimos a ver y eran los pelaos que venían corriendo porque la Policía (unos 20 uniformados) los perseguían”, relató un vecino del sector. “Fue cuando uno de ellos, que venía como parrillero, se bajó y comenzó a disparar”.
Gisella fue impactada por una bala en la terraza de esta vivienda, en el barrio Siete de Abril. / Luis Felipe de la Hoz
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En diálogo con este medio, Karen Moreno, tía de Gisella, informó ayer en la tarde que su sobrina “se encuentra en un coma inducido, mientras se le desinflama el cerebro”. Cuando eso suceda, será evaluada por un neurólogo y luego, el especialista decidirá si la opera para extraerle la bala.
Ana Manjarrés (blanco), abuela de Gisella Rodríguez, acompañada por otra de sus nietas.
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Un capturado
La Policía Metropolitana informó por teléfono que un hombre fue capturado con un arma artesanal y conducido a la URI de la Fiscalía.
Familiares del detenido lo identificaron como
Osnáider Charris Tapias, de 20 años.
Aseguran sin embargo que lo detuvieron mientras intentaba auxiliar a Rodríguez Jiménez.“Osnáider escuchó los gritos de los familiares de Gisella y salió a auxiliarla, la cargó y la llevaba al médico”, contó Margarita Tapias, tía del capturado. “Los policías no lo dejaban pasar y él empujó a uno de los uniformados, entonces varios de ellos lo agarraron a la fuerza, lo golpearon y se lo llevaron”.
Manifestó además que los agentes “le pusieron un chopo” a su sobrino. “Ese revólver era de uno de los pandilleros, que lo dejó tirado en el pavimento”.
La mujer puntualizo en pedir a las autoridades “que investiguen bien lo ocurrido, que no intenten limpiarse de lo que ocurrió con una persona inocente que solo trataba de ayudar a Gisella”.
Posterior a este hecho, la joven fue llevada por policías hasta el Hospital Santa María. Allí le hicieron trabajos de reanimación, pero debido a la gravedad de la herida, Rodríguez fue remitida en una ambulancia al Hospital General de Barranquilla.
Investigación
El teniente coronel Jesús De Los Reyes, comandante operativo de la Mebar, manifestó que se está llevando a cabo “la investigación del caso”.
“Los jóvenes se estaban lanzando piedras y estaban empleado armas de fuego artesanal. Es cuando llega la Policía y se da un cruce de disparos. Estamos llevando a cabo la investigación, con el propósito de determinar las responsabilidades”, aseguró el oficial.
