Mujer transgénero inyectó litro y medio de silicona líquida en las nalgas de una venezolana

Daño irreversible en los riñones, y diálisis de por vida tres veces por semana; son las consecuencias nefastas de un ‘procedimiento estético’ clandestino que dos travestis le practicaron a María Ester Petti Brito, una venezolana de 21 años que se obsesionó por aumentarle el tamaño a sus glúteos. Por el ‘trabajo’ cobraron $350 mil, y le inyectaron litro y medio de silicona fluida.

El ‘tratamiento’, si se le puede llamar así, se realizó hace 15 días en el apartamento donde vivían la víctima y una amiga, calle 75 con carrera 46, barrio El Porvenir, norte de Barranquilla.

EL ‘SOLO POMPI’

María Ester permanece ahora en estado crítico en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Barranquilla. Los médicos aseguran que sobrevivirá, pero tendrá que pagar un alto precio por confiarle su vanidad y su cuerpo a una pareja de delincuentes y estafadores.

El travesti que inyectó a la venezolana se hace llamar ‘Solo Pompi’, actualmente huye la justicia, que lo busca afanosamente. Borró sus fotos y perfiles de todas las redes sociales, en las que se promocionaba como “un esteticista experto en aumento de glúteos”.

“Mi sobrina lo conoció a través de otro travesti de nombre Carlos, quien dizque era amigo del hermano, pero qué amigo va a ser esa porquería, que también se desapareció. Nosotros (la familia) queremos que la Policía capture a esos dos travestis, y paguen porque lo que le hicieron a mi sobrina”, afirmó Lizbet Brito de Quintero, tía de María Ester.

La mujer explicó que su sobrina es nacida en Barquisimeto, capital del estado Lara, en Venezuela. En Barranquilla llevaba viviendo un año. La jovencita trabajaba en un negocio especializado en maquillaje, cejas, pestañas, y tratamientos estéticos faciales para mujeres.

Económicamente le iba bien, además María Ester es bonita, de cuerpo armonioso, linda sonrisa y larga cabellera negra. Pero su sueño era tener más ‘cola’, por eso aceptó la propuesta de Carlos y le pagó $350 a ‘Solo Pompi’, para que le inyectara la silicona en los glúteos.

En varios chats que guardan los familiares de la joven, queda en evidencia como ‘Solo Pompi’ fue a su apartamento y le realizó el procedimiento. Además del costo de las inyecciones, también le cobró los pasajes de ida y vuelta.

A los pocos días María Ester les escribió a los travestis, les dijo que se sentía mal, que tenía mucho vomito y síntomas de infección. Estos le respondieron que “es normal por la anestesia”, y le recomiendan que tome antibióticos, analgésicos y agua de azúcar.

Pero en realidad en ese momento el litro y medio de silicona fluida que le habían inyectado en ambas nalgas le había invadido el cuerpo, y la sustancia le estaba ‘comiendo’ los riñones.

Al otro día sus amigas y compañeras de trabajo se enteraron de que la chica se estaba muriendo en el apartamento, y la llevaron al Hospital Barranquilla. “Nos cuentan que la bajaron de un cuarto piso a rastras, ‘boqueando’, casi muerta”, se lamentó Lizbet de Quintero.

Esos mismos amigos llamaron a los familiares de Maria Ester en Venezuela y les dijeron que vinieran pronto a Barranquilla, porque se estaba muriendo. “Nos cuentan que ese día en que perjudicaron a mi sobrina, ‘Solo Pompi’ y Carlos hicieron otros ocho procedimientos iguales”, denunció la tía de la joven afectada.

Del travesti ‘Solo Pompi’ se desconoce su paradero, para localizarlo solo se cuenta con una foto que María Ester Petti Brito guardó en su teléfono celular. Con esta imagen las autoridades tratan de localizarlo.

‘LOS VAMOS A CAPTURAR’: ALMA SOLANO

La secretaria de Salud del Distrito, Alma Solano, informó que la Policía y Fiscalía, buscan a los dos travestis que provocaron esta situación. “No puede ser posible que a estas alturas de la vida hagan estos procedimientos sin tener el mayor cuidado y descuidar nuestra propia integridad. El llamado es a realizar este procedimiento con personal idóneo, en clínicas que presten todos los servicios”, clamó la funcionaria distrital.