Mataron al de los melones en El Boliche
Asesino se metió en el mercado y le disparó a Jaider Alfonso Mercado Pabón.
A Jaider Mercado lo mataron en el mercado ante quienes hacían mercado. Es un juego de palabras, sí, pero lo que pasó este miércoles en la madrugada no lo fue.
La sangre se mezcló con el extracto de los melones que quedaron aplastados en el sucio piso de El Boliche. Los comerciantes y compradores del sector se amontonaron e hicieron un círculo para ver la fatídica escena protagonizada por el cadáver de Jaider Alfonso Mercado Pabón, de 28 años, el cual quedó junto a las frutas que vendía.
El hombre había pasado parte de la noche del martes y la madrugada de ayer preparando su negocio. Lo habían visto de aquí para allá comprando frutas, en esta ocasión, después de varios días sin haber ido al mercado, se decidió a vender melones.
En ese sector casi todos los comerciantes se conocen y es normal que se hagan bromas entre ellos, por eso Jaider, al parecer, no prestó atención cuando uno de sus colegas, según testigos, le advirtió que lo iban a matar.
¿Deuda mortal?
Dijeron algunos vendedores del lugar que Jaider tenía varios días sin aparecerse por El Boliche y que durante su ausencia un hombre estuvo buscándolo para, presuntamente, cobrarle un dinero que le debía.
Jaider continuó con su venta y estando distraído, a las cinco de la mañana, a la carrera 41 con calle 10 llegó un delincuente que se mezcló entre tanta gente, se le acercó por la espalda y le disparó. El sonido del disparo asustó a quienes estaban cerca, facilitándole el escape al asesino quien blandiendo su arma de fuego se perdió entre las chazas de madera.
“Apenas vimos llegar al tipo que llevaba días buscándolo le dijimos que se abriera porque lo iban a matar, pero no hizo caso. Él creyó que porque esto estaba lleno no lo iban a matar y mire que lo dejaron tirado al lado de los melones que estaba vendiendo”, expresó un testigo.
La víctima cayó al suelo y junto a él se rompieron varios melones. Entonces las personas vencieron el miedo y se acercaron al cuerpo solo para darse cuenta que el dramático vaticinio que supuestamente le habían hecho minutos antes al vendedor se había cumplido, y de qué manera.
La Policía llegó al poco tiempo tras la llamada de alerta, pero los uniformados no pudieron dar con el paradero del homicida. Sin embargo, los investigadores de la Sijin, antes que la Unidad de Criminalística recogiera el cuerpo, ya sabían la identidad de la víctima y, gracias a la información de algunos comerciantes, el posible móvil del crimen: una deuda. Mercado tenía anotaciones por homicidio y lesiones personales, dijo la Policía.
