El venezolano Freddy José García Ortega, de 20 años, fue asesinado por desconocidos de dos impactos de arma de fuego en la cabeza, en cercanías al cementerio de Buritaca, en el área rural de Santa Marta.
El asesinato de este individuo, hermano de uno de los indiciados por los crímenes de Rodrigo Monsalve y Nathalia Jiménez, prende las alarmas entre la comunidad, quienes temen quedar expuestos a una guerra entre grupos delincuenciales.
El homicidio de García Ortega, de acuerdo a información suministrada por la Policía Metropolitana, se registró alrededor de las 10:10 a.m. en la zona rural de la capital del Magdalena.
Un desconocido lo ultimó a quemarropa y le dejó un letrero amenazante que tiene consternados a los pobladores de la zona.
“No alcahuetearemos más cosas mal hechas en la región, el que venga a dañar la tranquilidad será dado de baja (sic)”, decía el cartel escrito sobre un cartón.
Se conoció que Freddy García tenía seis meses de vivir en esta zona de la ciudad y se ganaba la vida como obrero.
Líderes cívicos mostraron su preocupación por este hecho e hicieron un llamado a las autoridades para que no los abandonen.
“No es posible que cometan otro homicidio más cuando se supone que está el Ejército y la Policía en la carretera. La zozobra está y no podemos estar tranquilos”, manifestó un líder, quien pidió anonimato por temor a represalias.
Sobre este hecho, el coronel Gustavo Berdugo Garavito, jefe de la Policía Metropolitana, aseguró que “era hermano de otro venezolano que está como indiciado por el caso de los esposos”.
“Estamos buscándolo (al hermano de la víctima) para que responda por el caso de la pareja”, dijo el oficial.
Notificados de la situación, una comisión de criminalísticas se desplazó al lugar para realizar la inspección del cadáver de Freddy García.
Los restos del venezolano fueron llevados a la morgue del Instituto de Medicina Legal.