A raíz de la denuncia que hizo AL DÍA el pasado 5 de febrero sobre el desplazamiento urbano de los que estaban siendo víctimas al menos 60 familias en la Urbanización Las Gardenias, ayer la Fiscalía General de la Nación con el apoyo logístico del Ejército Nacional, adelantó un operativo durante la madrugada que incluyó ocho diligencias de allanamiento con el objetivo de ubicar a los responsables de la distribución de sustancias ilícitas.
Más de 70 funcionarios del CTI de la Fiscalía y el Ejército llegaron hasta los apartamentos, que según las denuncias se convirtieron en foco de inseguridad y centro del tráfico de estupefacientes.
Durante los allanamientos la Fiscalía encontró armas de fuego, tipo “changón” y dosis de estupefacientes que estaban listas para su comercialización.
Además se recibió información para identificar los responsables del supuesto desplazamiento forzado de los vecinos a causa del tráfico de drogas.
Vale la pena recordar que unas 15 familias acudieron a la Personería Distrital y a la Defensoría del Pueblo en busca de ayuda para denunciar las intimidaciones de las que habían sido víctimas por parte de miembros de bandas criminales como Los Papalópez y el Bloque Central Renacer, a través de panfletos, llamadas telefónicas, mensajes por Whatsapp y hasta personalmente.
“Nosotros siempre nos hemos opuesto a la venta de drogas, pero en ese conjunto pasan cosas muy graves. Ya llegó el punto en que no podemos hacer nada porque finalmente no contamos con el apoyo de nadie”, afirmó uno de los afectados en su denuncia a este medio a inicios de este mes.
En una de las denuncias, la comunidad expresó que hombres armados con pistolas, subametralladoras y hasta granadas, se les acercan y les exigen que desalojen los apartamentos. “En este momento hay como 20 apartamentos desocupados, hay otros alquilados, y los que estamos ahí lo hacemos porque no tenemos para dónde irnos. No sabemos dónde pasar la noche”, dijo uno de los miembros de la junta administradora del Conjunto Siete.
AL DÍA conoció en su momento que un hombre de nacionalidad extranjera es quien ordena las amenazas contra los habitantes del conjunto. Al parecer, este sujeto sería el segundo al mando de una estructura delictiva dedicada a las extorsiones y el tráfico de drogas en el sector.