El Juzgado Séptimo Penal del Circuito con función de conocimiento de Barranquilla expidió sendas órdenes de captura en contra de Ginna Margarita Ricardo Cantillo, representante legal de la empresa Casadores Inmobiliarios S.A.S. y su pareja, el exteniente de la Policía Nacional, Juan Carlos Agámez Pájaro, para que cumplan condenan.
Hay que recordar que el pasado 21 de octubre en audiencia virtual, el mismo despacho judicial condenó a 11 años y 7 meses de cárcel a Ricardo Cantillo, y a 10 años y 7 meses de prisión a Agámez Pájaro, por el delito de estafa en mayor cuantía agravada en masa.
Igualmente el despacho judicial los condenó al pago de una multa de 839 salarios mínimos legales mensuales vigentes, equivalentes a más de $736 millones, cada uno.
En audiencia realizada el 10 de julio de 18, el Juez 16 Penal Municipal con funciones de control de garantías decretó la libertad por vencimiento de términos de Ricardo Cantillo y su expareja Juan Carlos Agámez Pájaro.
Dicha libertad fue amparada en lo establecido en el artículo 317 numeral 5 de la ley 906 de 2004, que señala “cuando transcurridos ciento veinte (120) días contados a partir de la fecha de presentación del escrito de acusación, no se haya dado inicio a la audiencia de juicio, en el caso de la justicia especializada el término de tiempo se duplicará”. La Fiscalía apeló la decisión del togado.
Empero, en octubre del mismo año, el Juzgado Quinto Penal del Circuito con funciones de conocimiento revocó la libertad por vencimiento de términos que había apelado la Fiscalía.
En la decisión de segunda instancia, el juez estableció que aún no se habían cumplido los términos para otorgar el beneficio y ordenó su captura.
Desde esa fecha Ginna Margarita Ricardo Cantillo se encuentra huyendo de la justicia.
Se apoderaron de más de $1.500 millones
Los hoy condenados, según la Fiscalía 23 Especializada de la unidad de Patrimonio Económico, engañaron a más de 25 personas mediante la supuesta venta de casa en remate que nunca entregaron a las víctimas que les consignaron entre 30 y 100 millones de pesos.
El monto de la estafa ascendió a los más de $1.527 millones, de acuerdo con el ente investigador.
Ginna Margarita Ricardo Cantillo, según las investigaciones, vendió la misma casa hasta en cuatro ocasiones a compradores diferentes. También se descubrieron cheques modificados y documentos irregularmente autenticados.
Se estableció finalmente que la condenada iba por los diferentes barrios de la ciudad mirando qué casas o apartamentos estaban en venta o arriendo para así poder mostrar un listado de inmuebles a sus incautas víctimas y apoderarse de sus dineros.
Igualmente se conoció que Ricardo Cantillo llegaba a almacenes de ropa de marca ubicados en centro comerciales ubicados en el norte de la ciudad, donde realizaba compras por altos valores, al parecer, dineros producto de las estafas realizadas a las incautas víctimas.