El 'polvo rosado' que habría acabado con la vida de María Andrea Cabrera

Después de que María Andrea Cabrera se fuera de fiesta en el norte de Bogotá y falleciera en extrañas circunstancias, el caso sobre su muerte sigue dando de qué hablar. El último dato arrojado de acuerdo al testimonio de Lina León, amiga de la joven, en el programa periodístico Cuatro Caminos apuntó que los muchachos (acompañantes masculinos de María Andrea esa noche) estaban con una “bolsita rosada” y que sus amigas no estaban consumiendo nada. Agregó que el contenido de esa envoltura, se inhalaba.

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La periodista del programa dijo que losinvestigadores sospechan que esa bolsa rosada que presuntamente vio Lina tendría 2CB, una droga sintética con apariencia de un polvo de color rosado, similar al que supuestamente vio la joven, y uno de sus compuestos es la metanfetamina,como la que apareció en el cuerpo de Cabrera.

María Andrea Cabrera I Facebook

Lo anterior, confirmaría la declaración hecha por el hermano menor de María Andrea, Andrés Cabrera, en el documento del abogado de la familia Jaime Granados, dondeafirma que había escuchado a un señor en el bar hablar sobre los acompañantes de su hermana, diciendo que ellos acostumbraban a echar ese tipo de sustancias en las bebidas. Sin embargo, la versión de Andrés Cabrera no es de primera mano sino información proveniente de terceros.

Sumado a este hecho, mediante una publicación en Facebook una joven llamada Daniella Acevedo escribió una carta para María Andrea, asegurando haber sido una ´amiga cercana´ de la fallecida.

Dicha carta hace mención a los prejuicios realizados hacia María Andrea por ser una joven con dinero. Acevedo creyó era necesario dar fe que a pesar de ser joven y de ´clase alta´, su amiga no consumía ninguna clase de droga, pues debido a su personalidad eufórica, no necesitaba estupefacientes para ´entrar en ambiente´.

Asimismo, dedicó parte del escrito a describir la forma de ser de Cabrera, manifestando que era una ´bacana´, llena de valores y que amaba a su familia.

María Andrea Cabrera I Facebook

A continuación la carta completa publicada en la cuenta de Facebook de Daniella Acevedo Vargas.

“Para quienes no tuvieron el placer de conocer a Andrea Cabrera

Hoy después de dos semanas de la muerte de una de mis amigas más cercanas y tras leer miles de comentarios de personas que no la conocieron y que dan por sentado que consumía drogas por su estrato, edad, o lo que sea. Decidí contarles un poco sobre la niña de la que hablan sin saber.

Andrea era una bacana, chistosa, alegre, relajada. Andrea era feliz, sencilla, humilde. Transmitía paz por su manera de ver la vida. Si pienso en ella la recuerdo sonriendo e incluso logro escuchar su risa burlona. Era buena amiga, pendiente, preocupada pero sobre todo incondicional.

Se gradúo de La Sabana de Comunicación Social y Periodismo, allí mismo hizo su práctica y desde entonces trabajó en esta institución hasta su último día. Era responsable, buena profesional. De ahí que su misma universidad la escogiera para que hiciera parte de su equipo.

Como su amiga y acompañante de varias rumbas puedo asegurar que no consumía ningún tipo de droga. Ni en fiestas de vallenato, reggaeton, salsa o electrónica. Su personalidad siempre fue eufórica, nunca necesitó de nada para ponerse “en ambiente”.

Andrea era una mujer con principios, a pesar de ser la más relajada de nuestro grupo de amigas tenía muy claro qué estaba bien y qué estaba mal. Le tenía respeto a la droga, no le interesaba probar ningún tipo de sustancia.

Amaba a Dios, era una mujer virtuosa, llena de fe. Cuidaba, valoraba y adoraba a su familia. Su papá era su héroe, su mamá su reina y su hermanito su mejor amigo. Era amada, protegida y valorada por ellos.

Sobra decir que era hermosa físicamente porque supongo que de eso todos ustedes ya se dieron cuenta, pero les garantizo que su belleza más grande era la interior.

Andrea y Lina María León eran mejores amigas, inseparables. Ambas muy parecidas por su conducta intachable pero personalidad montadora. De ahí que se dijeran “twins”. Tenían una amistad particular, ambas llenas de vida, de sueños. Se cuidaban como hermanas y se amaban como tal.

Hoy, intentando asimilar que Andre no está y viendo el rumbo que ha tomado su investigación me duele el alma porque al igual que su familia siento la necesidad de que se limpie su nombre y se aclare que su muerte fue por intoxicación a causa de consumo INVOLUNTARIO de éxtasis.

Andrea se fue y no hay manera de revivirla o devolver el tiempo. Partió teniendo apenas 25 años, con mucha vida por delante. Sí, Andrea era de clase alta, pero eso no disminuye el dolor de su familia o de sus amigos. Eso no hace que no sea una víctima de personas inescrupulosas. Por favor, no la juzguen por ser una niña con dinero. No discriminen la gravedad de su caso por su nivel social.

No, Andre no era drogadicta ni consumidora ocasional. No, Lina no consume ni bebe licor. Yo que SI LAS CONOZCO lo puedo asegurar. Yo que he convivido con ellas puedo meter mis manos al fuego porque sé quiénes son.

Ella era Andrea Cabrera inocente, libre de drogas. Era mi amiga, me duele su ausencia y me atormenta la injusticia”.

Con información de Julie Toscano