Los 1.441 internos que tiene actualmente la Penitenciaria de Alta y Mediana Seguridad de Valledupar, conocida como ‘La Tramacúa’, iniciaron este martes una huelga de hambre indefinida en protesta a las presuntas violaciones de los Derechos Humanos, y tratos crueles e inhumanos a los que, según denuncian, son sometidos por parte de funcionarios del Instituto Penitenciario y Carcelario, Inpec.
Además de rechazar los malos tratos, los reclusos hicieron una serie de exigencias para mejorar sus condiciones en la cárcel. Entre las peticiones está el ingreso a las celdas de un ventilador que funcione con corriente eléctrica, debido a las altas temperaturas que hace en el establecimiento.
En un comunicado a la opinión pública señalan que de acuerdo con una sentencia de la Corte Constitucional con fecha del 2017, se les otorgó el uso de internet y de telefonía móvil por lo que esta es una de las peticiones en la huelga de hambre.
A esta protesta también se sumaron los internos del patio de tratamiento especial como son los alta peligrosidad como Luis Alfredo Garavito Cubillos, señalado de abusar sexualmente y asesinar al menos a 200 niños, Jhon Jairo Vásquez Velásquez, alias Popeye, Lebith Rúa, alias La Bestia del Matadero, Rafael Uribe Noguera, condenado por la muerte de la pequeña Yuliana Samboní, entre otros.
También piden no usar el uniforme el día de las visitas, y que estas sean semanales, que les permitan hacer una siesta de 1 hora después del almuerzo, que no sean encadenados y que el expendio permanezca abierto en horas determinadas.
Ciro Pérez, delegado para asuntos penitenciarios de la Personería Municipal de Valledupar, indicó que la mayoría de estas peticiones son inviables porque cada establecimiento penitenciario tiene la facultad para hacer su propio manual y darle aplicación.
“Ellos están usando vías de hecho, cuando tienen vías de derecho que son las acciones de tutelas, sentencias que le están concediendo unos derechos, entonces pretenden ganar la batalla jurídica por vía de una huelga que mientras se hacen las consultas en el nivel central pierden esa acción porque los que están dejando de recibir alimentos son ellos”, destacó el funcionario.
Al tiempo señala que “es difícil que ellos ganen esa batalla porque el Inpec siempre le responde lo mismo, que esas peticiones no son viables, y si el Inpec ha decidido aceptar algunas lo ha hecho de forma lenta, teniendo facultad para hacerlo de esa manera”, puntualizó Ciro Pérez, luego de la visita de la Personería a ‘La Tramacua’.