¿Qué Pasa?

Capturan al presunto asesino de Brenda Pájaro

Siete meses tardaron la Policía y Fiscalía para reconstruir los últimos pasos de la ama de casa que fue hallada muerta en Miramar el año pasado.

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Él fue la persona que estuvo con Brenda en sus últimos minutos de vida”.

Con esas palabras sentenció el general Mariano Botero la certeza de que Tomás Manuel Maldonado Cera, de 48 años, es la persona que habría asesinado de un golpe en la cabeza a la ama de casa el 25 de julio de 2018, mismo día en que fue reportada como desaparecida.

Brenda Inés Pájaro Bruno fue buscada por más de un mes por unidades del Gaula de la Policía hasta que el 28 de agosto su cuerpo en descomposición fue hallado en una zona enmontada del sector de Miramar, en el norte de Barranquilla.

Hasta ese sitio, donde fueron hallados sus despojos, llegó acompañada del hoy capturado luego de que este la recogiera a la salida del centro médico donde asistió con su hija la tarde de aquel 25 de julio para nunca más volver.

La relación

Brenda Inés Pájaro Bruno era una mujer de 44 años, separada, con cuatro hijos, dos mayores y dos menores de edad, entre los cuales hay una niña en condiciones especiales que asistía periódicamente a terapias en un centro de rehabilitación del barrio Ciudad Jardín.

En ese centro médico trabajaba prestando sus servicios como transportador Tomás Manuel Maldonado Cera, un hombre de 48 años y casado.

A partir de ahí, surge entre ellos una relación clandestina que duró, según estimaciones de la Policía Metropolitana, aproximadamente dos años.

Pese a ser una relación extramarital, Brenda y Tomás se las arreglaban para verse constantemente, y ese 25 de julio no fue la excepción.

Él la llamó y le propuso que se vieran en el sector de Miramar. La pasó a recoger en el centro médico, y de ahí saliendo con rumbo a los alrededores de Parque 100, como quedó registrado en cámaras de seguridad”, dijo el general Botero, comandante de la Policía Metropolitana.

Recorrido hacia la muerte

Brenda y Tomás abordaron una camioneta blanca, tipo van, hasta llegar al sector de Miramar.

Antes de parquear dieron varias vueltas en la zona. Luego parquearon bajo un árbol y ahí, en cámaras, se ve cuando bajan las dos personas, una de ellas Brenda, que llevaba una camiseta amarilla, y un hombre de contextura gruesa, 1,70 de estatura con camiseta negra y un pantalón con líneas verticales a los costados, ese es Maldonado”, aseguró Botero.

Una vez fuera del carro, ambos ingresan voluntariamente a la zona enmontada y pasado un tiempo prudencial se ve cuando solo el hombre sale del lugar.

“El hombre sale, aborda el vehículo y se queda ahí cerca de 10 minutos, quizá dimensionando lo que acababa de hacer. Luego arranca el carro y se va de la zona”, agregó el general.

Los móviles

Para las autoridades del Gaula, Fiscalía y distritales el tema de que esta fuera una relación por fuera del matrimonio, que quizá se estaba saliendo de control, habría motivado la comisión del delito.

Lo que vemos es que hay una pareja que entra voluntariamente a la zona. Presumimos que estando allí surgió una discusión entre ellos y este hombre se llenó de rabia y actuó golpeándola en la cabeza con un objeto contundente”, sostuvo Botero.

Factores clave

Siete meses pasaron para que pudiera ser descubierto el perpetrador de uno de los feminicidios que más dio de qué hablar en Barranquilla el último año.

Durante ese periodo, las autoridades pasaron de no tener “nada” a capturar al principal sospechoso del crimen.

Para Rodrigo Restrepo, director seccional de Fiscalía, la búsqueda con base en datos, elementos técnicos y testigos silentes, fueron determinantes en la investigación, ya que no hubo fuentes humanas que hubieran presenciado dicho hecho.

Las cámaras de seguridad fueron claves. Gracias a la minuciosa revisión de cada una de ellas entre el centro de rehabilitación y la zona de Miramar pudimos obtener detalles importantes y todo esto ayudó a que se considerara a Tomás Maldonado como el presunto autor del feminicidio de Brenda”, informó el fiscal.

La captura

A Maldonado Cera se llegó tras siete meses de ardua investigación y análisis de detalles como el carro que conducía, el cual pertenece a la esposa del hombre.

Este carro en particular, una van marca Chevy Pass de primera serie, con particularidades como una abolladura en el parachoque y un rayón en la puerta, ambos del lado derecho, permitieron establecer que el carro parqueado en la calle 41b # 1H-75 en el barrio Bellarena y el que aparecía en los videos con Brenda Pájaro a bordo era el mismo.

Gracias a ese detalle se estableció la identidad de Maldonado, quien quedó registrado en la base de datos de la seccional de Tránsito con varios comparendos y así fue como en horas de la mañana de este lunes, un dispositivo de agentes de Gaula y Fiscalía por tierra y aire, llegaron a la dirección antes mencionada, allanaron la vivienda y en su interior se encontraba Tomás Maldonado Cera.

Acceso carnal

Otra de las revelaciones relevantes de esta esperada captura del presunto asesino de Brenda Pájaro fue sobre una posible violación a la mujer el día de su desaparición y muerte.

El director fiscal, Rodrigo Restrepo sostuvo que a Tomás Maldonado Cera, además de imputarle los delitos de feminicidio agravado y hurto calificado, también se le adjuntará el de acceso carnal violento, “porque la evidencia indica que la señora Brenda presuntamente fue accedida carnalmente”, dijo el fiscal.

Esta revelación contradice la entregada en septiembre de 2018, por el entonces director de Medicina Legal, Carlos Valdés, quien confirmó a EL HERALDO que no encontraron señales de abuso sexual en el cuerpo de la ama de casa luego de exámenes de laboratorio practicados a los restos de Pájaro Bruno.

“Los análisis de los laboratorios dieron resultados negativos. Es decir, Medicina Legal no halla elementos de prueba que demuestren abuso sexual”, reveló el funcionario en ese momento.

Se espera que hoy durante las audiencias programadas en el Centro de Servicios Judiciales contra Tomás Maldonado se entreguen mayores detalles que revelen el porqué de la muerte de Brenda Pájaro.

Por Diana Navarro

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