La tranquilidad de un día de trabajo en una peluquería del centro de Palmira, en el Valle del Cauca, se interrumpió de manera trágica cuando un hombre, portando un casco de motocicleta, ingresó y abrió fuego en varias ocasiones contra un joven que estaba siendo atendido por un estilista.
El video de la cámara de seguridad del local muestra el momento en el que el sicario ultima a Juan Antonio Guevara, de 25 años, quien murió de manera instantánea ante la mirada atónita de clientes y empleados del local.
“El sicario entra y no le importa que hayan personas dentro de la peluquería. Él entra como si nada y sale así”, manifestó un testigo del ataque a Noticias Caracol.
Las autoridades del municipio siguen recopilando pistas de las demás cámaras y relatos de los testigos para dar con el paradero del victimario, que, según se conoció, era esperado a las afueras del lugar por otro hombre en una moto.
Por extraño que parezca, este tipo de atentado no es aleatorio. Casos como este se reportan en Colombia y el exterior con relativa frecuencia, pues las peluquerías son lugares públicos donde las víctimas se encuentran desprevenidas, inmóviles, con poco margen de escape y a merced de sus victimarios.