Albañil habría asesinado a su mujer y luego se suicidó
El hombre tenía antecedentes por violencia intrafamiliar y lesiones personales.
Un albañil, de 32 años, al parecer asesinó a su mujer, de 33, y luego se suicidó en hechos ocurridos la mañana de ayer al interior de un apartamento en el barrio Las Cabañas, en inmediaciones de la sede Sabanas de la Universidad Popular del Cesar, en Valledupar.
Según testigos, el hombre identificado como José Alfredo Núñez Morales estaba colgado del cuello con un cable sujetado al soporte del televisor, mientras que el cuerpo de la mujer quien respondía al nombre de Lillibeth Ochoa Reyes, se encontraba en una cama con espuma en la boca. El hecho que conmocionó a los habitantes de este sector sucedió a las 8:00 de la mañana.
Mercedes Reyes, madre de Llilibeth Ochoa, llegó al lugar a buscar a su hija, encontrando el cuadro trágico. “Un amigo me llamó a decirme que no sabían de ella, le escribían y la llamaban, pero no contestaba, me comunico a mi casa y me dicen que ella había salido desde las doce del mediodía del martes. Hoy (ayer) en la mañana vine del trabajo hasta aquí donde él vivía, pero mientras esperaba a que el dueño de los apartamentos abriera la pieza, porque estaba cerrada, se me da por abrir un poco la ventana y ya la veo acostada en la cama con espuma en la boca y él estaba colgado”, manifestó Reyes, quien indicó que su hija era estilista y madre de dos hijos menores de edad.
La última vez que los vieron con vida La última vez que vieron con vida a Lillibeth Ochoa Reyes fue a las 2:00 de la tarde del martes, cuando llegó al apartamento donde residía José Núñez. Pero el albañil había llegado a la casa de su madre en el barrio Siete de Agosto, a las 6:00 de la tarde del mismo día. Mercedes Reyes cuenta que Lillibeth y José tuvieron una relación de año y medio, pero los celos por parte del hombre hicieron que la pareja terminara; sin embargo, desde hace cuatro meses, al parecer, se seguían viendo en el apartamento de él.
“Nunca le llegó a pegar, pero sí demostraba agresividad con ella. Constantemente mi hija me contaba lo que él le hacía, la aconsejábamos para que lo dejara. Le tocó cambiar tres veces de Sim Cards para que él no la llamará, porque la contactaba siempre para que volvieran”, relató la madre de Lillibeth.
Los vecinos manifestaron a las autoridades no haber escuchado ruidos o visto alguna situación extraña durante la noche en el inmueble donde vivía José Núñez. Al día siguiente, los familiares de las víctimas fueron los que hallaron la fatídica escena y luego dieron aviso a la Policía.
Al lugar llegó la unidad criminalística del CTI de la Fiscalía, para la inspección de los cadáveres. Según el reporte, el cuerpo de Lillibeth Ochoa no presentaba señales de violencia física, por lo que las causas de su muerte serán establecidas por los peritos de Medicina Legal en Valledupar.
Por otro lado, se conoció que José Núñez registraba anotaciones judiciales por el delito de lesiones personales en 2011 y una más por violencia intrafamiliar en 2014, en el que al parecer la víctima fue una expareja.
CRÍMENES PASIONALES
En los últimos dos meses cuatro crímenes pasionales han marcado al departamento del Cesar. El pasado seis de julio una menor de 15 años murió en una clínica de Valledupar, tras ser baleada por su expareja de 28, en el municipio de San Alberto.
El 14 de julio otro hecho de violencia contra la mujer se registró en el municipio de Curumaní donde Deiner Tarazona Quintero, de 24 años, asesinó a su novia Angie Zaray Carrascal Torrado, de 19, con un disparo en la espalda.
El hombre falleció después en un accidente de tránsito cuando huía en una motocicleta y chocó con un tractocamión. El viernes 10 de agosto en el barrio Juan de Dios en el municipio de Gamarra, fue hallada muerta Yissenia Colina Vásquez, de 19 años, de nacionalidad venezolana. Por este crimen fue capturado su compañero sentimental Carlos Zuleta Mendoza, también venezolano, como el presunto homicida.
Con información de: Mohamed Osman.