¿Qué pasó con los 2 delincuentes que aún están libres por el desmembramiento de Ángelo Cerra?

Un año ha transcurrido del asesinato y posterior desmembramiento de Ángelo Cerra Jaimes, y el caso, a pesar de que los supuestos motivos del mismo fueron revelados, y de que uno de los homicidas fuera capturado y enviado a prisión, así como otro muerto a tiros en procedimiento policial, aún hay dos personajes que están ausentes de la investigación adelantada por las autoridades. Uno de estos, quien cometió la violenta acción de mutilarlo.

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Todo se registró el 5 de junio de 2022 en el sitio Hotel Spanic, ubicado en la calle Murillo No. 6 Sur 27, hasta donde fue citado Cerra y al que llegó a bordo de una motocicleta en compañía de una persona que, en su momento, la Fiscalía descubrió que era llamada “Zúñiga”. En ese lugar se encontraron con Absalón David Noriega Vizcaíno, alias Barbas.

Sin embargo, ‘el Barbas’ no se encontraba solo, pues, según  el ente acusador, también estaban presentes Juan Camilo Reales Sierra, alias Gokú, y un hombre conocido como ‘el Gato’. Todos estaban supuestamente vinculados con ‘los Rastrojos-Costeños’, liderado por Ober Ricardo Gutiérrez Martínez, alias el Negro Ober.

En ese momento, Absalón y alias el Gato realizaron una videollamada a Jesús Amando Olivares Guzmán, alias Bebo o 07, detenido en la cárcel Modelo por concierto para delinquir con fines de extorsión. A esa misma comunicación se integró Ober Ricardo, quien ordenó que subieran a la azotea del hotel a Ángelo y a su acompañante.

Conforme a lo establecido por la Fiscalía, el motivo para subirlos allí era el de “confrontarlos” para que hablaran, ya que según ellos, estos eran informantes o miembros de ‘los Costeños‘, grupo delincuencial rival al suyo. Esto no fue comprobado por las autoridades. Sin embargo, la otra teoría que tomó fuerza fue que, al parecer, la verdadera razón por la que estos fueron conducidos hasta el lugar más alto de ese domicilio fue que días antes un Policía del cuadrante le quitó un arma de fuego a uno de ‘los Rastrojos-Costeños’, pero esta no fue puesta a disposición de la Fiscalía.

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Pero ¿qué implicaciones tenía Cerra en ello?. El investigador del caso manifestó que, supuestamente, estos criminales lo señalaron de ser quien les había llevado la Policía a los ‘cachorros de Ober’. Presuntamente, el hecho de que los policías hayan llegado al lugar fue el detonante o el móvil para que los retuvieran en el motel.

Asesinato y mutilación

A eso de las 4:00 de la madrugada, todos los mencionados se encontraban en la azotea del negocio. ‘El Barbas’, ‘el Gato’ y ‘Gokú’ comenzaron a golpear brutalmente a Ángelo, mientras que “Zúñiga” fue amarrado con una sábana del hotel. Cerra batalló y antes de dar su último aliento logró quitarle un machete a alias el Gato y lo hirió en una pierna. Eso lo exaltó y enfureció, por lo que lo golpearon mucho más, lo amarraron y torturaron.

Ángelo permanecía en el suelo casi sin energías. Lo siguiente fue el tiro de gracia si necesidad de un arma. ‘Gokú’ y alias el Gato le metieron una manguera con agua en la boca para ahogarlo y luego culminaron con más golpes. Cerra Jaimes dejó de respirar.

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Entre las 12:00 del mediodía y las 3:00 de la tarde del mismo domingo llegó el criminal encargado de mutilarlo. Un hombre conocido con el alias de Juanchito. Este arribó al sitio por órdenes de ‘Ober’ y procedió a descuartizarlo ante la presencia de los otros sujetos. El morbo y el sadismo no se quedó en el hecho como tal, sino que ‘el Barbas’ grabó toda la escena y luego la envió a ‘07’ y a ‘el Negro Ober’, como registro del trabajo “bien hecho”.

Mientras que a su acompañante le “perdonaron la vida”, no sin antes amenazarlo.

Evidencia

El cuerpo desmembrado del hombre de 34 años fue envuelto en bolsas y las extremidades dejadas en los barrios Galán, Los Laureles y Las Cayenas, de Barranquilla, donde posteriormente fueron encontradas.

El ente investigador detalló que las partes humanas habían sido llevadas en un carro marca Renault Logan de color gris y placas HQT-110, que había sido reportado como hurtado en Medellín. Una fuente judicial ligada al caso señaló que tras el crimen, miembros de ‘los Rastrojos Costeños’ habían puesto en venta el carro, con el fin de cubrir los gastos para sacar de la cárcel a uno de los integrantes de dicha estructura.

Este vehículo fue encontrado en un lavadero de Soledad por la Sijín de la Policía, y en este habrían hallado rastros de sangre.

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Captura y muerte

Diez días después del aberrante hecho (15 de junio) Absalón David Noriega Vizcaíno, alias el Barbas, fue capturado por el CTI de la Fiscalía. Posteriormente un juez con funciones de control de garantías decretó medida de aseguramiento intramural y lo envió a la Penitenciaría de El Bosque.

Por su parte, el 14 de julio, Juan Camilo Reales Sierra, alias Gokú, resultó muerto a tiros en medio de un allanamiento en un inmueble del barrio Villa Sol, de Soledad, realizado por uniformados del Grupo Gaula del Ejército y la Policía.

Alias Gokú, según información suministrada por la autoridad, inició su vida en el mundo del hampa, al parecer, a partir de la comisión de delitos como hurtos a personas. 

El individuo tenía una orden de captura por los delitos de homicidio agravado, tortura, secuestro simple, hurto calificado agravado, concierto para delinquir y tráfico de estupefacientes y, al parecer, tal misión iban a materializar los investigadores del Gaula ese día, pero resultó baleado luego de dispararle a los uniformados.

¿Y los restantes?

Quizá su apodo sea por la facilidad que tiene de pisar con suavidad sin dejar rastro o por su sagacidad al momento de escapar. Pues alias el Gato sigue libre y huyendo de la justicia luego de participar del asesinato y posterior desmembramiento de Ángelo Cerra.

Este hombre nunca fue capturado por las autoridades. Sin embargo, este medio conoció que está siendo rastreado por miembros de la Fiscalía, a través de una señal de teléfono.

De igual forma, al individuo encargado de mutilar a Ángelo y conocido como ‘Juanchito’, también le pisan los talones.

El proceso judicial contra los implicados avanza en los estrados. A Ober, hoy preso en Popayán, ya le imputaron cargos por este crimen.