¿El asesinato de Roberto Vega Daza en España le pone fin al clan?

• En octubre de 2022, los Vega Daza, conocido clan, fueron expuestos tras un enfrentamiento en Punta Roca donde robaron a Jonathan Ospino Illera, vinculado a 'Negra Dominga'.

• Investigados por detectives de la Dijín durante 10 años, los Vega Daza estaban asociados a la compraventa de vehículos usados.

• La Defensoría del Pueblo emitió una alerta sobre 'los Vega' en junio de 2023, vinculándolos al narcotráfico, homicidios y una oficina de cobro.

Roberto Carlos Vega Daza; su padre, Rafael Julio Vega Cuello, conocido como Kike Vega, y sus hermanos Ray Jesús y Ronald Iván Vega Daza, hoy todos muertos, quedaron expuestos ante las autoridades después del enfrentamiento a tiros que tuvo lugar en octubre de 2022, en el sector de descanso de Punta Roca, en jurisdicción de Puerto Colombia.

Los Vega Daza, como era conocido el clan, se vio en la obligación de reforzar las medidas de seguridad y de bajar más su perfil por la muerte de Jonathan José Ospino Illera, el familiar del narco conocido con el alias de Negra Dominga, asesinato que fue atribuido a Roberto Carlos, asistente a la conocida fiesta de Punta Roca.

Antes de eso, se sabía que los Vega Daza eran seguidos en toda Barranquilla desde hacía unos 10 años por detectives de la Dijín, algunas veces requeridos por la Policía local, pero nunca estuvieron a un paso de ir tras las rejas. Eran asociados con una compraventa de vehículos usados.

Ni siquiera en 2018 cuando dos de los hermanos, Roberto y Ronald, dieron muerte a un sujeto que, supuestamente, llegó a asesinarlos en un sector del norte de Barranquilla. Luego se dijo que esta persona era de nacionalidad venezolana y que se trataba de un asesino a sueldo que había sido contratado para ejecutar la misión.

Tal hecho fue investigado, pero en esa oportunidad se manejó que los hermanos actuaron en defensa propia. Por otro lado, la madre de estos dijo que todo obedecía a confrontaciones que habían arrastrado desde La Guajira por sus denuncias sobre corrupción.

Alerta temprana

En junio de 2023, poco antes de que se perpetrara en Villa Campestre la masacre que dejó muertos al padre y a los dos hermanos de Roberto Carlos Vega Daza, la Defensoría del Pueblo emitió la alerta temprana sobre la localización geográfica del riesgo y las organizaciones criminales que operaban en ese momento en Barranquilla y su área metropolitana.

Allí se detalló sobre ‘los Vega’, entre otras organizaciones con más poderío criminal, pero no se profundizó sobre sus actividades ilícitas.

No obstante, bajo la sombra, para las autoridades estaban vinculados con el narcotráfico local, los homicidios selectivos y con una oficina de cobro que funcionaba en la capital del Atlántico bajo la fachada de una empresa de vigilancia.

La fuente judicial señaló en su momento que a través de esa firma, registrada en la Cámara de Comercio de Barranquilla, se legalizaban las armas de fuego usadas por Rafael Julio Vega Cuello y los hermanos Vega Daza.

Pero no solo ellos, padre e hijos, harían parte de ese grupo. Las autoridades tenían perfilados a al menos 10 personas más como presuntos integrantes de la estructura, así como dos grandes aliados como ‘los Pepes’, bajo el mando de Digno Palomino, y una banda conocida en Medellín como ‘los Mondongueros’, custodios de alijos de droga. Así mismo, inteligencia de la Policía asoció en su momento a un agente activo de la Policía Metropolitana de Barranquilla con la estructura.

Sobre el manejo del narcotráfico, la Policía y la Fiscalía tenían en registros que presuntamente dominaban la zona norte de Barranquilla, Puerto Colombia, y en Santa Marta usaban como fachada una empresa de transporte de frutas para sacar droga por zona portuaria, al parecer, hacia España y Países Bajos.

Un informante muerto

Toda la información sobre los Vega Daza o un aporte importante de sus actividades criminales y de las otras personas vinculadas a la organización habría sido ratificada en el primer semestre de 2021 a diferentes organismos en Colombia y en el exterior, y quien lo hizo, según versiones aportadas por testigos, fue asesinado luego de que fuera delatado por un miembro de la Policía.

Pero además en al menos cinco asesinatos aparecían referenciados como presuntos determinadores. Sin embargo, cabe aclarar que ninguno de los Vega tenía orden de captura.

El abogado Óscar Santodomingo Payeras, de 44 años; el exparamilitar Javier Insignares Toro, alias JJ; Julio César Polanía Martínez, de 53 años, y el excapo Libardo Parra González habrían caído tras la orden de los Vega.

¿Seguía delinquiendo?

Una vez ocurrió en junio de 2023 la masacre de los Vega Daza en el sector de Villa Campestre, en Puerto Colombia, Roberto Carlos, sobreviviente, habría entrado de manera ilegal a Venezuela. Allí consiguió un pasaporte falso a nombre de un tercero, supuestamente nacido en Maracaibo, para luego salir hacia Panamá. En el istmo estuvo un par de meses y con su nueva identidad saltó al Viejo Continente, al parecer no para esconderse, sino en busca de alianzas con organizaciones internacionales dedicadas al tráfico de cocaína.

Estuvo en el país de Albania, para establecer alianzas con albaneses y el Cartel de los Balcanes.

Supuestamente, ‘Beto Vega’, como era conocido, también  habría tenido un ingreso a Italia para contactarse con clanes de la ‘Ndrangheta’, la poderosa organización criminal del sur de Italia.

Luego viajó a España, pasó por Madrid y ahora estaba en Valencia, aparentemente, en compañía de su pareja. Esta habría sido quien alertó a la familia de su asesinato el pasado martes 27 de febrero. También de un barranquillero, amigo personal, que murió junto con él.

Pero ahora, después de su muerte, salieron a relucir algunos casos ocurridos recientemente en los que este habría tenido injerencia, entre estos un atentado que tuvo lugar el pasado lunes 19 de febrero en el sector de Villa Campestre.

Producto de dicha acción resultó muerto Brandon Forero Sampayo, de 31 años, y con lesiones de gravedad Pedro Rafael Castro Serje, de 28, un acompañante. Este, luego del ataque, fue capturado por el delito de homicidio. Mientras que Néstor Junior Forero Sampayo, hermano del occiso, salió ileso del atentado.

La versión que se investiga de manera preliminar o estaba en indagación es que Roberto Vega Daza habría realizado llamadas intimidatorias al padre de los Forero Sampayo, a nombre del Clan del Golfo, exigiendo una gruesa suma de dinero por el asesinato de Néstor Guavita, un funcionario de la Alcaldía de Barranquilla que les había vendido un automotor a los Forero el año anterior.

Investigadores de la Fiscalía y de la Policía, consultados por esta casa periodística, hoy manejan la hipótesis de que el Clan de los Vega Daza o la estructura de ‘los Vega’ no acabaría con las muertes de sus integrantes, “solo cambiaría de razón social”.