En dolor se convirtió la pasión por un equipo de fútbol. Recorrer de estadio en estadio todo el país para alentar al Junior era la alegría de Jonathan Sandoval Cabarcas, hasta que el lunes festivo pasó a ser otra víctima del regionalismo deportivo, un mal de no acabar.
El joven, de 26 años, se encontraba con unos compañeros en la zona conocida como La Candelaria en la ciudad de Medellín. Habían llegado a un establecimiento en inmediaciones de la carrera 51 con calle 55 de la capital de Antioquia cuando a eso de las 11:00 de la noche se originó una riña. Cabe resaltar que para ese momento habían pasado horas del final del partido entre Junior y Envigado, él y sus conocidos vestían ropa del equipo rojiblanco.
La Policía señaló que un sujeto identificado como Juan Camilo Tabares le propinó tres heridas con arma cortopunzante a Jonathan en la espalda. Esta persona intentó huir, pero resultó siendo aprehendida; mientras que Sandoval Cabarcas fue auxiliado y llevado a un centro médico.
Para ese momento, una llamada desde Medellín contactó a la familia del joven. Ellos no sabían qué tan grave estaba y enviaron a una prima de él al hospital, cuando la muchacha llegó los galenos le informaron que las chuzadas fueron mortales.
Eso le dijo la familiar a Yaneth Cabarcas Jiménez, abuela de la víctima. La mujer dialogó con AL DÍA sobre la historia de su nieto; ella, entre lágrimas y frustración, aseguró que la vida de a quien además consideraba su “hijo” giraba en torno al club de fútbol de su ciudad natal.
“Jonathan estuvo en el estadio en compañía de su hermano menor, este se venía para Barranquilla y lo acompañó, lo embarcó en la terminal de transporte, y se devolvió con los amigos. A nosotros nos avisaron que lo habían atacado, una sobrina que estaba allá se trasladó a la clínica, allí los médicos le dijeron que mi nieto estaba muerto”, relató la mujer.
Sostuvo que le regresaron la llamada y le contaron: “Es muy horrible que un hijo salga y después te digan que lo mataron por allá. Nunca pensé que a mi nieto lo iban a dejar tirado”.
Para Yaneth aún no hay un panorama claro de lo que ocurrió, pues Jonathan había subido estados a sus redes sociales bailando y compartiendo en los que se le veía alegre, tal cuál como era.
“Iba a todos los partidos, siempre acompañaba a Junior. Al día siguiente viajaba para Cali porque estaba viviendo allá hace un tiempo. Era mi primer nieto, se crió aquí en el barrio El Pueblito (…) sinceramente lo que queremos justicia, hagan lo que tengan que hacer con esta persona que capturaron”, finalizó Cabarcas Jiménez.
Es de anotar que el cadáver del joven permanecía en Medellín hasta esta publicación, a esperas del trámite para ser trasladado a Barranquilla.