Una terrible historia de violación y descuartizamiento se presentó en mayo de 2016, en Qumilí, Argentina. La víctima fue Mario Agustín Salto, ‘Marito’, un niño de 11 años, que había desaparecido de su casa y 48 horas después, encontraron su cuerpo en bolsas de basura.
Mario Agustín Salto tenía 11 años | Foto tomada de: Clarín.
De acuerdo con el medio argentino Clarín, las autoridades afirmaron que el menor fue violado y desmembrado en medio de un ritual satánico.
Luego de una exhaustiva investigación y gracias a los perros policías que ayudaron en el caso, las autoridades lograron dar con los responsables de la muerte de ‘Marito’. Según informó el portal crónica.com, cuatro hombres y una mujer fueron capturados este 27 de noviembre por ser los principales sospechosos de haber secuestrado, violado y torturado al menor.
Los señalados, todos miembros de una familia, fueron identificados como Miguel Ángel Jiménez (58), alias "El Brujo"; su hijo Miguel Angel (23), su esposa, Arminda Lucrecia Díaz (57), directora de un colegio; el hijo de la mujer, Alfredo Daniel Albarracín (22) y Pablo Ramírez (38), alias "El Loco". Otras dos personas fueron capturadas y, según los encargados del caso, se cree que hay más personas involucradas.
Así fue la captura del hombre:
Esta muerte conmocionó a los argentinos y en varias ocasiones salieron a marchar para pedir justicia por este aberrante crimen. El padre de ‘Marito’, Mario Salto, contó al medio que a pesar de que él trabajaba en otra provincia, nunca se perdió ninguna de las marchas.
Durante ese tiempo, ‘El Brujo’, principal sospechoso del crimen, se acercó a la familia para ofrecerles ayuda económica y hasta participó en las movilizaciones donde se pedía que este atroz hecho se esclareciera. La familia descubrió que el hombre trató de ganarse la confianza de la familia con la intención de saber más de la investigación.
Marcelo Salto, tío de ‘Marito’, contó al medio que nunca habían sospechado de ‘El Brujo’. “Era una persona que la conocen mucho en Quimilí. Tenía contactos políticos, de la Policía y judiciales. Es una especie de puntero de acá. Lo que no sabemos, la pregunta que nos hacemos, es por qué se tardó tanto en llegar a esta instancia. Por qué no allanaron antes o llamaron ellos a los perros. Fue un triunfo con dolor. Sentimos que nuestro changuito va a descansar en paz”, agregó.
La jueza del caso, Rosa Falco, afirmó que luego de un año y medio del asesinato de ‘Marito’ el circulo se cerró. “Tenemos autores intelectuales, autores materiales. Hemos encontrado muchísimas evidencias que nos demuestran que Marito ha sido víctima de un crimen ritual, se puede afirmar”, indicó la mujer.