
El dolor de cuello y espalda, uno de los más frecuentes hoy en día
La mejor forma de prevenir el dolor es la actividad física.
Tanto el dolor de espalda como las molestias en el cuello son problemas médicos bastante comunes y ocho de cada 10 personas lo padecerán en algún momento de sus vidas.
DOLORES EN EL CUELLO: CAUSAS
La región cervical de la columna vertebral comprende el cuello y los hombros. La expresión popular “me duele la cervical” se refiere precisamente a esos molestos dolores que se niegan a marcharse y que pueden originarse en los músculos, huesos, articulaciones, tendones, ligamentos o nervios de la región cervical.
Los problemas en los hombros, la mandíbula, la cabeza y los brazos también pueden ocasionar molestias en el cuello y los hombros.
Comúnmente la tensión muscular es responsable de esos dolores principalmente al realizar actividades cotidianas de forma incorrecta como por ejemplo: Permanecer inclinado en el escritorio por mucho tiempo; mala postura al sentarse por un largo período; el monitor de la computadora muy alto o muy bajo; dormir en posición incorrecta; girar el cuello inapropiadamente sobre todo mientras se hace ejercicio, entre otros.
DOLOR DE ESPALDA: CAUSAS
El dolor de espalda puede ser leve, agudo o crónico, surgir repentinamente a consecuencia de una caída o aparecer después que levantamos un objeto pesado. Algunas de las causas comunes de un dolor de espalda incluyen: Lesiones en los discos, espasmos o tensión muscular, hernias discales, esguinces, fracturas, accidentes, caídas y levantar objetos pesados.
¿CÓMO PREVENIR Y ALIVIAR?
El dolor de espalda es crónico cuando dura más de tres meses, pero la mayoría de estos dolores desaparecen espontáneamente después de algún tiempo. Si el dolor de cuello o espalda aparece después de un gran esfuerzo físico, el frío puede aliviarte en las primeras 48 horas.
El calor es recomendable después de ese tiempo o en casos de tensión muscular. Los analgésicos de venta libre y el reposo ayudan a aliviar el dolor de espalda, sin embargo, permanecer en cama por más de uno o dos días puede empeorarlo. Si el dolor es severo o no mejora al cabo de 3 días, debes llamar a un médico.
También debes buscar atención médica si presentas dolor en la espalda después de una lesión.
Con información de: Jáder Atencia Avilez.