Julio Comesaña habló del incidente con el orientador argentino del Deportivo Cali. Mantiene la versión dada tras el partido. “Yo no voy a reaccionar en contra de una persona porque sí”, dijo.
Julio Comesaña no pasa por su mejor momento en Junior. La derrota ante el Deportivo Cali, así no la mereciera, porque su equipo realmente hizo bastante por el triunfo, terminó de sacar de casillas al DT colombo-uruguayo, que protagonizó un momento incómodo y bochornoso, al término del juego, al intentar agredir a su colega del Deportivo Cali, el argentino Lucas Pusineri.
Delante de las cámaras, Comesaña empujó a Pusineri y le lanzó un golpe que no logró impactarlo, luego de que ambos se hayan saludado en el campo, tras el pitazo inicial. El técnico rojiblanco venía de realizarle una protesta al árbitro Jorge Tabares, cuando Pusineri se lo encontró y se originó el incidente.
“Le dije a Pusineri: ‘te felicito, pero déjame’. Cuando sigo me da un cachetazo en la espalda. Una cosa es un cariño y otra cosa es un cachetazo. Yo no voy a reaccionar en contra de una persona porque sí. Si vos te fijas en la grabación te das cuenta que algo pasó”, manifestó el orientador rojiblanco en diálogo con AL DÍA.
“Yo cuando gano no me voy a saludar al otro, yo saludo a la gente cuando arranca el partido y luego se acabó. Yo venía de hablar con el árbitro, yo no me metí con él para nada”, agregó.
Comesaña está preparado para todo... y todo incluye una posible sanción. El DT mantiene la versión que dio en la rueda de prensa luego del juego en el estadio de Palmaseca y espera por conocer lo que colocó el árbitro en el informe arbitral.
“Eso traerá su cola, dependiendo lo que diga el informe arbitral. Yo no tengo ningún problema, estoy preparado para todo. A estas alturas del partido he visto cosas y ahí en Cali no es la primera vez que pasa esto, siempre ocurre lo mismo con el médico y todo el mundo presionando al árbitro. Meten y presionan, meten y presionan, termina el primer tiempo, va a empezar el segundo y siguen con la presión. Así no es”, dijo.
El técnico rojiblanco no quiere seguir ahondando el tema. Desde ya prepara el duelo del domingo ante el Bucaramanga. Ayer habló y ahora prefiere centrarse en lo que para él es más importante, el presente de su equipo.
“Yo no voy a seguir echándole leña a algo que ya pasó y listo, es un tema entre Pusineri y yo y se acabó. Él sabe lo que pasó, yo también y los que estaban ahí, también, y ahí se queda”, expresó.
Comesaña no terminó contento con el resultado (derrota 2-1 en el juego de ida de los cuartos de final de la Copa Águila), pero sí está conforme con la respuesta que dio el equipo en casa del Deportivo Cali, especialmente en el primer tiempo.
“Yo estoy conforme igual con la derrota, no estoy contento, pero pienso que el equipo hizo un buen trabajo, que jugó bien el partido, que pudimos llevarnos algo más, pero eso es historia pasada. Enfrentamos a un buen equipo en su casa, no jugamos solos”, dijo.
“El tema fútbol no me genera nada raro, ni enojo, ni molestia. El fútbol es futbol y es así, hay que entenderlo así, no voy a criticar al equipo porque recibió al final dos goles, me parece que hizo una muy buena actuación todo el tiempo.
Y bueno, a veces se gana y a veces se pierde, qué se va a hacer, hay que estar tranquilo”, concluyó el DT, que arribó anoche a Barranquilla junto al plantel.
Otros altercados
Choque con Perea:
En 1995, al término de un juego entre Junior y Santa Fe (2-2), en el ‘Metro’, Comesaña, que era DT del cuadro cardenal, fue expulsado y al salir del campo no recibió de buena forma la pregunta del periodista Édgar Luis Perea y terminó quitándole el micrófono, jalándole el cable a la fuerza. Fue controlado por otros periodistas.
Pelea con Pinto:
En 2006, cuando Comesaña dirigía al Real Cartagena se trenzó en una pelea con Jorge Luis Pinto, DT en ese momento del Cúcuta. Fue sancionado con ocho fechas y $4.080.000 de multa.
Lo provocó Alcázar:
En 2009, Equidad venció a Junior 1-0 con gol de Herly Alcázar en el último minuto. El delantero cartagenero se lo celebró en la cara a Comesaña, lo que originó la reacción del colombo-uruguayo que fue a increparlo, siendo detenido por sus ayudantes del cuerpo técnico.