Descansó en paz. El boxeador colombiano Luis Quiñones fue sepultado este domingo en Barrancabermeja , su tierra natal, después de haber perdido la vida el jueves pasado.
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El pugilista luchó por su vida varios días, pero finalmente murió después de estar internado desde el sábado 24 de septiembre luego de desvanecerse en el ring, en el que sería el último combate suyo.
El pasado viernes por la noche al boxeador lo velaron en suelo barranquillero y estuvo bastante acompañado por personalidades del boxeo, familiares y personas en general conmovidas por la situación que sufrió el joven.
El sábado anterior su cuerpo llegó a Barrancabermeja, donde fue sepultado ayer al mediodía en un entierro al que llegó bastante gente, tanto de familia como de gente externa que fue a despedir al joven atleta.
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Luis Quiñones llevaba cinco años viviendo en Barranquilla, por lo que se consideraba alguien de la casa. Sin embargo, en su tierra natal todavía le tenían bastante cariño y por eso el gran acompañamiento.