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Familia de Borré vibró con el partido de ‘Rafita’

La fiesta no pudo ser completa.

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Tristeza total entre los familiares y vecinos de Rafael Santos Borré en el barrio Las Palmas. La euforia y alegría con la que vivieron el encuentro entre Boca Juniors y River Plate ayer por el primer juego de la final de la Copa Libertadores, se apagó en el minuto 75, cuando el árbitro chileno Roberto Tobar le sacó tarjeta amarilla al delantero barranquillero y con esto llegó al límite de amarillas y no jugará el partido definitivo el próximo 24 de noviembre en el estadio Monumental.

La fiesta en la casa de Kweilan Borré, hermana de Rafa, se prendió desde el mediodía con sus familiares y vecinos. “Yo fui temprano a la iglesia para tranquilizarme y poder ver el partido sin tanto nervio. Se me bajó un poquito la ansiedad por esperar tanto para ver a Rafita”, afirmó Deisy Maury, mamá del atacante barranquillero de River.

En el comedor de la residencia la familia improvisó una especie de altar con algunos trofeos que ganó Rafa durante su carrera en Barranquilla y en el medio quedó una imagen de la Virgen María. “Había que meterle fe, era un partido muy duro, además la espera hizo que todo fuera más estresante”, agregó Deisy.

A los 15 minutos de juego por poco se genera el grito de gol en la casa de los Borré. ‘La Máquina’ conectó un cabezazo dentro del área que tapó con un gran esfuerzo el portero Agustín Rossi. Era el gol de Rafita pero todo quedó en las ganas. Durante el entretiempo le siguieron dando vueltas a la olla de sopa de mondongo que prepararon para el encuentro.

“Me vine a darle vuelta a la sopa, allá en la sala hay algunos tomando cervecita para el calor, yo paso los nervios acá mirando el sancochito”, comentó entre risas la mamá de Rafa. Pero a los 75’ vino la decepción. Borré cometió una infracción por detrás a Carlos Tévez y Tobar le sacó la tarjeta amarilla, que automáticamente lo sacó del partido que se disputará en casa de River.

“Una lástima, la fiesta del otro partido que teníamos organizada se dañó. Vamos igual a estar pendientes de él, pero hubiera sido mejor con Rafita en el campo y mucho más si anotaba. Yo considero que no era para amarilla, pero el árbitro lo decidió así”, expresó con lástima Deisy Maury al final del cotejo.

MANTIENEN LA FE EN RIVER

Ismael Borré, papá de Rafael, también quedó muy decepcionado tras la amarilla que sacó a su hijo del juego definitivo. Junto a su esposa Ana Beatriz Madera e hijos vivieron el partido en el Hotel Barranquilla Plaza, cómodamente instalados pero con los nervios de punta durante los 90 minutos.

“Muy bueno todo, vivimos el partido con mucha emoción, yo estuve de pie todo el tiempo porque los nervios me hicieron reaccionar así. Veo a River bien, en el Monumental tiene fútbol para ganar la Libertadores”, expresó.

Al igual que donde los familiares de Rafa en el barrio Las Palmas, la tarjeta amarilla les cayó como un baldado de agua fría. “Pienso que lo debieron sacar antes, para evitar esto, me pareció fatal la tarjeta. Pero son cosas de Dios y del fútbol, esperemos a hablar con él para ver cómo está anímicamente”, afirmó Ismael.

“Para el choque en el Monumental vamos con la misma fe, así no esté Rafa, vamos a apoyar al equipo, a Juanfer, a Armani, a todos y por supuesto a mi hijo, que está muy cerca de ser campeón de la Libertadores”, agregó.