El caimán que hizo historia en Argentina y en el 4-4 en Chile

Por muchos motivos Efraín ‘Caimán’ Sánchez es uno de los estandartes del fútbol colombiano a nivel mundial. El barranquillero, quien falleció ayer en Bogotá a los 93 años, marcó un antes y un después al convertirse en el primer futbolista de nuestro país en militar en el balompié argentino.

Entre los tantos detalles que se desprenden de su legendaria carrera también está el sitial de honor que se ganó junto a varios de sus compañeros al hacer parte de la Selección Colombia que jugó por primera vez un Mundial de Fútbol, en Chile 1962.

Por estos y varios detalles es que el Caimán deja una huella imborrable en el fútbol colombiano, que lo recuerda como un excelente portero y un director técnico de muchos conocimientos, por su sabiduría alrededor de este deporte y sobre todo, por la gran calidad humana que tenía.

Inicios y paso a Argentina

Su carrera profesional arrancó en 1943 con Millonarios, aunque su paso por el equipo bogotano fue breve ya que al poco tiempo empezó a jugar en la tercera categoría de la Liga de Atlántico. Tenía 17 años.

Al año siguiente jugó en Club Caldas, aunque el panorama le cambió en 1945, cuando sufrió una lesión de rodilla que lo tuvo por fuera del campo ocho meses.

En 1946 pasó a jugar en Club La Fortuna y allí sus atajadas no pasaron desapercibidas para el DT peruano José Arana, quien decidió convocarlo a la Selección Colombia que iba a disputar los Juegos Centroamericanos y del Caribe 1946, que se celebraron en Barranquilla. En esa ocasión ganaron la medalla de oro en fútbol.

Fue su ‘matrícula’ en la Selección y en 1947 fue al Suramericano (hoy Copa América) que se disputó en Guayaquil (Ecuador).

Fue el punto de partida para que Efraín se convirtiera en leyenda. A pesar que terminaron últimos, su actuación bajo los tres palos fue muy buena y eso le valió para recibir una propuesta de San Lorenzo de Almagro para irse a jugar a Argentina.

El debut fue el 25 de abril de 1948 en el estadio Juan Carmelo Zerillo en el triunfo 5-2 de San Lorenzo como visitante ante Gimnasia y Esgrima de la Plata.

Nace el caimán

En su llegada a Argentina Sánchez fue abordado por los medios de comunicación de este país. Los periodistas se enteraron que el nuevo guardameta del Ciclón llegaba procedente de Barranquilla, lo cual dio lugar a los titulares del día siguiente: “El Caimán nos lo envían desde Barranquilla”, en referencia a la canción que compuso el maestro José María Peñaranda: El Hombre Caimán.

Regreso al fútbol colombiano

Luego de un año y cinco meses y de haber disputado 20 partidos como titular con San Lorenzo, el Caimán regresó en septiembre de 1949 a Colombia para hacer parte de América de Cali.

Seguidamente pasó por Deportivo Cali (1950), Junior (1951-1952), Santa Fe (1953-1954) y finalmente en 1955, con la camiseta de Independiente Medellín ganó por primera vez el título de campeón del fútbol colombiano. En el Poderoso estuvo hasta 1957 cuando otra vez llamó la atención en el exterior y Atlas de México se la llevó al fútbol azteca por dos temporadas.

En 1960 regresó con 34 años a Colombia y volvió a las toldas de Medellín, en donde fue técnico y jugador esa temporada y luego lo mismo entre 1962 y 1963. Al año siguiente se fue a Millonarios, en donde cumplió con los mismos roles y se convirtió nuevamente en campeón del fútbol colombiano en esa temporada.

Luego tuvo un paso por Deportes Quindío y finalmente cerró su carrera en Junior, cuando tenía 42 años.

Presente en glorioso 4-4

En 1961 Efraín fue convocado por el DT argentino Adolfo Pedernera para disputar las eliminatorias al Mundial de Chile 1962. La serie clasificatoria fue ante Perú y Colombia logró avanzar a la cita orbital tras vencer 1-0 a los incas en Bogotá el 30 de abril del 61 y luego igualó 1-1 el 7 de mayo en Lima.

El debut en Chile fue con derrota 2-1 ante Uruguay el 30 de mayo del 62, pero el 3 de junio el Caimán y sus compañeros harían historia para el fútbol colombiano al conseguir una de las mayores gestas en un Mundial de fútbol y con el portero barranquillero bajo los tres palos colombianos.

Ese día el equipo cafetero enfrentó a Unión Soviética en el estadio Carlos Dittbon de Arica. Rápidamente los europeos se pusieron en ventaja 3-0, pero Colombia descontó a través de Hermán Aceros.

Los soviéticos respondieron otra vez y se pusieron arriba 4-1 en el inicio del segundo tiempo, pero la escuadra colombiana haría lo impensado e igualó las acciones con tantos de Marcos Coll (gol olímpico), Antonio Rada y Marino Klinger.

Subcampeón continental

Luego de dirigir a Junior en 1971 la Federación le encomendó la tarea de conducir a la Selección Colombia, con la que disputó la Copa América de 1975, que en esa ocasión no tuvo sede fija.

Bajo el mando del Caimán el combinado cafetero superó en fase de grupos a Paraguay y a Ecuador, luego en semifinales a Uruguay, pero ante Perú perdió el título en una serie muy dramática de tres encuentros.