La actriz samaria Viña Machado volverá a la televisión como una de las protagonistas de la serie La ley Secreta, cuyo estreno será mañana a las 10:00 p.m. por la pantalla del Canal Caracol. Esta es una historia de ficción inspirada en experiencias reales de las heroínas anónimas que trabajan en secreto para distintas divisiones de inteligencia de la policía colombiana.
En esta producción interpreta a Sandra, una experimentada agente secreta a punto de retirarse y que recibe la orden de volver al campo fingiendo ser la esposa de su peor enemigo. Ella deberá cumplir una misión que buscará la caída de los banqueros que lavan dinero con el narcotráfico.
Tal como su personaje Viña es una mujer independiente, su personalidad carismática y explosiva hace que no se quede sin exponer sus opiniones y las preocupaciones que le genera la sociedad.
En dialogo con AL DÍA la actriz y modelo habló no solo de Sandra, sino de aquello con lo que se identifica, la posición de la mujer en el siglo XXI y también reveló que estuvo a punto de morirse durante el tiempo en que tuvo a su vientre a su hijo León.
¿Cuéntanos sobre este nuevo personaje que interpretas en la pantalla nacional?
Mi personaje de Sandra es maravilloso porque sé que muchas mujeres se van a sentir identificas. Mostrará cómo, el hecho de ser madre, no le impedirá que cumpla sus sueños como profesional y que todo aquel que preste un servicio como estos, devuelve la fe en la humanidad.
¿Cómo vives la experiencia de trabajar y ser mamá al tiempo?
Salir a trabajar y dejar a mi hijo es lo más duro que hay, pero es lo más bonito que existe porque regreso a la casa estando completa, sabiendo que estoy cumpliendo mis sueños.
Por la noche llego cansada y apenas que veo a León se me olvida todo, hasta que estuve trabajando durante 12 horas. Sin embargo, sé que para las madres que se quedan en casa es igual, esto es jodidísimo, es un trabajo duro y nadie lo paga. Mi madre trabajaba en la casa, yo la veía como mantenía nuestro hogar en Santa Marta y nos criaba.
Yo me dediqué un año a la maternidad y necesitaba salir porque me estaba ahogando, eso no quiere decir que soy mala mamá, sino que mi lado creativo, que es lo que soy, no se podía quedar en el olvido. Yo tengo que seguir con mi vida, porque quiero que mi hijo se sienta orgulloso de mí, y diga que yo le demostré a punta de resiliencia que los batazos se reciben de pie, y si uno se cae se levanta.
¿Se puede decir que la resiliencia es una de tus cualidades?
A mí no me hablen de empoderamiento, que esa vaina es cliché, lo mío es pura resiliencia, sí creo en ese valor, porque yo lo viví, y lo vive esta sociedad que nos ha dado tanto palo, que no nos valora, pero también nosotras de verdad tenemos que aprender a trabajar hombro a hombro y a mirarnos sin recelo.
¿Piensa que se les está dando más protagonismo a las mujeres en la televisión colombiana?
Yo desearía saber si algún compañero ganó más que nosotras, ahí estaríamos hablando de igualdad. Es un problema que viene desde Hollywood y en todos los aspectos. No importa que tan preparada estés si eres la protagonista o antagonista, pero un hombre gana más.
Yo prefiero no preguntar para no darme mala vida, pero poder contar historias tan masculinas desde la perspectiva de la mujer es la misión de ‘La ley secreta’.
Esta es una serie contada desde el punto de vista de mujeres, porque hay un montón de estas en la Policía secreta y tienen vida, esposos, hijos, quienes a veces ni saben a qué se dedican.
¿Hoy eres lo que soñabas cuando niña?
Yo nunca soñé con ser esto, yo no tengo ni idea. A veces me pongo a pensar qué quería ser y recuerdo que solo quería viajar y ser muy feliz, afortunadamente lo soy. En cuanto a lo de viajar ha amainado, pero lo hice y gracias a esas experiencias hablo cuatro idiomas.
Considero que he tenido una vida bonita, con todos sus altibajos. Al final del día soy muy agradecida, estuve a punto de morirme y aquí estoy con un hijo, y con la oportunidad de hacer personajes como este, es un trabajo tan bonito.
En estado de embarazo, a los seis meses, me dio una trombosis de senos profundos, lo que me produjo una bacteria, que es mortal para los bebés, mi hijo está sano y vivo, los dos somos un milagro.