¿Qué Pasa?

ESPECIAL | Adiós a Lorraine Warren, musa inspiradora de cintas de terror

Dio pie para historias como Annabelle, El Conjuro y La Monja.

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La famosa saga de películas Expediente Warren ha perdido a uno de sus miembros más queridos: Lorraine Warren, clarividente estadounidense que falleció a los 92 años. Ella se convirtió en musa inspiradora para cintas de terror como la muñeca Annabelle, El conjuro y La monja.

La noticia fue confirmada solo hasta el pasado viernes por su yerno, Tony Spera, a través de la cuenta oficial de Facebook de la Sociedad de Nueva Inglaterra para la Investigación Psíquica. “Ha fallecido en paz durmiendo en su casa”.

“Mi abuela, Lorraine Warren, nos dejó en silencio y en paz para unirse a su amado Ed. Fue feliz y estuvo riendo hasta el final”, dijo su nieto Chris McKinnell a través de Twitter.

Lorraine y su esposo, Ed, que murió en 2006, eran investigadores paranormales de renombre mundial con casos muy mediáticos como el Horror de Amityville o el poltergeis de Enfield (Reino Unido), los cuales son mostrados en la saga El conjuro, que lleva dos películas y cuatro secuelas: Annabelle (2014), Annabelle 2: la creación (2017), La monja (2018) y la recientemente estrenada La maldición de la llorona (2019), que aún está en cartelera en las salas de cine del país. Estos seis largometrajes han recaudado en taquilla más de 1.550 millones de dólares.

El universo cinematográfico de los Warren tiene ya en marcha la tercera entrega de su saga principal, de nuevo protagonizada por Vera Farmiga y Patrick Wilson, otro spin-off protagonizado por The Crooked Man, la espeluznante criatura que apareció en El caso Enfield, y la tercera entrega de Annabelle. Una película que llevará por título Anabelle vuelve a casa, que estará centrada en el museo que Lorraine y Ed Warren crearon con los objetos embrujados que habían recopilado en sus investigaciones paranormales y que incluía a la verdadera muñeca Annabelle.

CON PODERES ESPECIALES

Lorraine que también fue médium, estudió en un colegio católico de niñas, en donde, según una entrevista que concedió en 2013, tuvo su primera experiencia cercana con lo paranormal, ya que en 1933 con solo 7 años comenzó a ver luces alrededor de las personas.

Sin embargo, ella no sabía el significado de esas luces. “Recuerdo que una vez le dije a una monja de mi colegio: tus luces son más brillantes que las de la madre superiora” -Ella contestó- “¿Cuáles luces?”.

Inmediatamente la mandó como castigo a rezar, pensando que estaba mintiendo. Fue en ese momento cuando Lorraine comprendió que ver el aura de las personas era un don que solo ella tenía.

Nadie de su familia o amigos le creían, así que por mucho tiempo tuvo que guardar el secreto de las cosas que veía y presentía, hasta que conoció a su esposo Ed Warren. Su romance inició a los 16 años y juntos se convirtieron en unas de las parejas más populares del mundo paranormal, siendo contratados por personas de diferentes países para que acabaran con sus maldiciones.

En 1952 fundan la Sociedad de Nueva Inglaterra para la investigación psíquica que inicialmente solo se dedicaba a investigar diferentes apariciones. Sin embargo, con el paso del tiempo, los Warren se dieron cuenta de que querían ayudar a las personas desde la raíz y por eso no podían limitarse a explicar qué había sucedido. Para ello, ambos necesitaban obtener el conocimiento necesario para lidiar con los diferentes entes y lo lograron ampliar sus poderes a través de varios miembros del clero. Su trabajo se basó en la religión, pero también utilizó la ciencia.

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