El Rey Momo inicia desde hoy su mandato de alegría y desenfreno rumbero durante cuatro días en muchos países del mundo.
Una de las novedades de estas fiestas carnestoléndicas a nivel internacional es la máscara del presidente de Estados Unidos, Donal Trump, la cual se está vendiendo como pan caliente en las calles de las ciudades donde se celebra el Carnaval.
De cabello rubio y tez anaranjada, la máscara de Trump ocupa un espacio privilegiado en las vitrinas de las tiendas de disfraces de Río de Janeiro (Brasil) y de algunas capitales de Estados Unidos, Latinoamérica y Europa, donde se celebra el Carnaval.
Las caretas de plástico de Trump son vendidas en Brasil a unos 7 reales (unos 2,3 dólares), mientras que en Estados Unidos y en Europa son comercializadas por el doble de precio. Trump ha ganado notoriedad en las comparsas callejeras que arrastran a miles de personas en las calles no solo de Brasil, sino del mundo entero, que desde hoy se rinde a los pies del Rey Momo.