Choques que han destrozado a los salseros

Hay gran expectativa entre los salseros por el estado de salud del trombonista y cantautor neoyorquino William Anthony Colón Román, conocido en el mundo salsero como Willie Colón. Este peso pesado de la salsa que mañana llegará a los 71 años de edad, lucha por su vida en un centro médico, luego de verse involucrado en un accidente de tránsito junto a su esposa Julia May Craig.

El siniestro ocurrió el pasado 20 de abril en la región de Outer Banks (Carolina del Norte-EE. UU.), cuando ‘El Malote del Bronx’, quien iba al volante de su casa rodante con la que constantemente se pasea por varias ciudades, al parecer perdió el control del vehículo que terminó volcado. Su mujer ya fue dada de alta, mientras que el músico de ascendencia boricua, según informó ayer su representante Pietro Carlos, fue trasladado de Virginia a Nueva York. “Ya no está en condición grave, está estable. Hay que estar vigilantes porque fue muy fuerte. La buena noticia es que ya está en Nueva York”, señaló Carlos.

Agregó que el exintegrante de la Fania All Stars y quien también hizo dupla con Héctor Lavoe ha sido sometido a una serie de exámenes médicos que se extenderán hasta hoy.

Pietro Carlos agregó que ha hablado algunas palabras con él, aunque el artista “ha estado más bien callado, escuchando”.

Las lesiones del salsero incluyeron conmoción cerebral, laceraciones en el cuero cabelludo que requirieron 16 grapas y fracturas en su vértebra cervical C1.

Esta noticia ha mantenido en vilo a los amantes de la música tropical y de algunos artistas que se han pronunciado, entre ellos Rubén Blades con quien Willie grabó siete producciones entre 1975 a 1982, entre ellos Siembra, considerado el álbum más vendido en la historia de la salsa y que incluye éxitos como: Plástico, Pedro Navaja, María Lionza, Dime, entre otros. “Enviamos nuestros deseos de una pronta recuperación para ambos y que Willie pueda superar este difícil momento”, expresó el panameño.

Este mensaje de apoyo fue ‘aplaudido’ por los internautas, debido a que ‘El Poeta de la Salsa’ dejó de lado las diferencias jurídicas que tienen y lo respaldó en este duro momento. La amistad entre estos artistas terminó tras un conflicto por incumplimiento de contrato en 2003 en el estadio Hiram Bithorn en San Juan, Puerto Rico, con el que celebraron los 25 años de su icónico álbum Siembra. Colón alegó que Blades no le pagó el dinero acordado (115,000 dólares) y lo demandó.

Salseros que murieron en accidentes viales

Algunos de los íconos de la salsa han perdido la vida tras protagonizar siniestros viales. Uno de ellos fue el cantante boricua Cheo Feliciano, intérprete de éxitos como El ratón, Anacaona, A las seis, Salí por que salí, Los entierros, y un largo etcétera. Su deceso ocurrió El 17 de abril de 2014 en un accidente de tránsito en el Barrio de Cupey (Bajo) del Municipio de San Juan, Puerto Rico. Al parecer el cantante de 78 años se quedó dormido y perdió el control del automóvil, colisionando contra un poste. Feliciano no portaba el cinturón de seguridad, y falleció debido a que su cráneo chocó con el cristal delantero del vehículo.

El cantautor cubano Polo Montañez, reconocido como ‘El Guajiro Natural’, también pereció en un accidente. El creador de éxitos como Un montón de estrellas, Flor palida, Si se enamora de mí, Un bolero, entre otros, pereció el 20 de noviembre de 2002, de regreso a San Cristóbal, Cuba, ciudad donde residía. Su auto chocó contra un camión en la zona conocida por La Coronela, resultando gravemente herido. Seis días después del accidente, falleció hospitalizado en el Hospital Militar Carlos J. Finlay.

En 1971 el vehículo remolque que transportaba a la orquesta La Selecta rumbo a Connecticut (EE. UU.) se accidentó, hecho que desencadenó la muerte del trompetista Luisito Maisonet e hiriendo gravemente al trombonista Richard López y al director Raphy Leavitt quien quedó en estado de coma. En su recuperación Leavitt tuvo varias visiones que le dieron vida al clásico La cuna blanca, tema con el que son despedidos los salseros. “Miren donde va/ volando se ha ido/ aquel viejo amigo/ a la virgen fue a adorar”, reza en la canción.

Alberto Antonio Ledée, conocido como ‘Toñito’ Ledée, que se destacó como voz líder de la Sonora Ponceña consolidando éxitos como Yambeque. Falleció el 28 de mayo de 1986 en un accidente de tránsito en San Juan, Puerto Rico; Ledée se quedó dormido al volante a causa del agotamiento de actuar tres noches seguidas sin descanso con la Ponceña.

Otras muertes que dolieron al gremio salsero fueron la del compositor venezolano Alí Primera a quien El Gran Combo le grabó Cunaviche adentro, y el Sexteto Juventud Alma Llanera. El 16 de febrero de 1985, el padre de los salseros Servando y Florentino perdió la vida en un accidente automovilístico ocurrido en una autopista de Caracas cuando su camioneta fue impactada de frente por un vehículo.

La bailarina estadounidense Isadora Duncan, murió estrangulada el 14 de septiembre de 1927 en Niza (Francia), luego de que su bufanda se enredara en la llanta trasera del vehículo en que viajaba. En su memoria Celia Cruz grabó un tema que lleva su nombre.

El susto de Andy Montañez y Raúl

El veterano cantante Andy Montañez pasó el susto de su vida en carreteras costeñas. El 30 de abril de 2012, se trasladaba de Valledupar rumbo a Barranquilla en una camioneta, luego de haber participado en el Festival Vallenato. El conductor perdió el control del vehículo, por lo que ‘El Niño de Trastalleres’ salió expulsado y sufrió fuertes contusiones en varias partes del cuerpo, especialmente en la espalda. “Estuve un poquito triste por el accidente, pero el hecho es que la gente de Barranquilla se portó muy bien conmigo, se preocupó mucho por mi salud y eso me reanimó”, dijo Montañez a AL DÍA.

El cubano Raúl Alfonso, del estelar dúo Hansel y Raúl, el 5 de agosto de 2001 sufrió un accidente de tránsito en Cartagena, en el que estuvo a punto de perder la vida tras recibir múltiples golpes en la cabeza. Ahora padece de ‘lagunas’ o vacíos mentales en torno a situaciones del pasado. Esto lo mantuvo alejado de los escenarios durante una década.