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Terroríficos fantasmas de los antiguos ferrocarriles de la Costa

Tres leyendas que surgieron en las antiguas vías del Caribe.

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La época de los ferrocarriles o locomotoras en Colombia dejó muchas anécdotas y datos interesantes que pueden apreciarse en los archivos ferroviarios de nuestro país, pero existe cierta información intrigante y oscura que se mencionaba en la prensa de esa época relacionada con hechos escalofriantes.

Sonámbulos que morían en las vías de un tren, un maquinista que al parecer era un asesino serial y el caso de un hombre que en uno de estos trenes se enamoró de la propia muerte. Tres casos insólitos con datos oficiales, que pueden tratarse de leyendas horripilantes que se crearon en torno a estos gigantes de hierro.

La primera leyenda está relacionada a los Sonámbulos Fantasmas de Santa Marta. En el lugar donde estaban las antiguas vías férreas del Ferrocarril de Santa Marta que atravesaba la Zona Bananera y el Puerto Marítimo. A finales de 1991 en la locomotora de los Ferrocarriles Nacionales, cuentan que se vieron espíritus que caminaban hasta estos lugares gritando de manera estruendosa y desapareciendo como humo.

Los pobladores cercanos a estas antiguas vías del tren, asocian los espectros con los casos mencionados en los periódicos en la década de los 50, los cuales mostraban muertes insólitas de personas que llegaban a hasta estas vías y morían arrolladas por la locomotora, al parecer bajo un estado de sonambulismo, ya que sus cuerpos eran encontrados con ropa de dormir y sus familiares afirmaban que eran personas sin ningún tipo de tristezas o depresión.

Según las leyendas de esos tiempos la culpable era una mujer espectral que los sacaba de sus habitaciones dormidos y los guiaba hasta las vías del tren para que encontraran la muerte.

“Mi abuelo me cuenta que todas esa muertes fueron generadas por el espíritu de una mujer que se había quitado la vida al dejarse arrollar por el ferrocarril de Santa Marta debido a que tenía una pena de amor”, contó Renato Escorcia, nieto de un antiguo maquinista.

SE ENAMORÓ DE LA MUERTE

El Ferrocarril que se paseaba entre Cartagena a Calamar, que estuvo en funcionamiento entre 1894 hasta 1951, posee una historia de amor de ultratumba. Según los relatos de este desaparecido tranvía, un hombre llamado Evaristo, había quedado locamente enamorado de una mujer que conoció un domingo en la estación de Arjona (Bolívar) cuando en los vagones en esos días se celebraban fiestas itinerantes a punta de vals y jazz.

Según esta historia la misteriosa mujer era la muerte ya que este hombre la esperaba todos los días en la estación de Arjona y nunca más supo de ella, hasta que en su lecho antes de fallecer por una extraña enfermedad, la señalo diciendo: “Esa que está en la puerta y que nadie puede ver es la que me enamoró, ella es la muerte y por fin me encontró”.

EL MAQUINISTA DEL DIABLO

En muchas partes donde hubo líneas férreas en la región Caribe se ha hablado de un tipo de tren fantasma que ven en las noches llegar, el cual es manejado por alguien parecido al diablo.

Según este relato se trata de un maquinista llamado Roque, quien tenía pacto con las tinieblas y ofrecía chance a los que encontraban en el camino y los mataba, ofreciéndoselo al diablo. “Muchos dicen que estas tres leyendas están conectadas entre sí”, relata Andrés Araujo investigador de hechos paranormales.

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